Este año se gastarán 73.700 millones de dólares en hardware, software y servicios de seguridad

Y, dentro de cuatro años, se rebasarán ya los 100.000 millones de dólares. Serán 101.600 millones, según los cálculos de la consultora IDC.

El mercado de la tecnología de seguridad no dejará de crecer en el futuro cercano. Mientras este año está previsto que alcance los 73.700 millones de dólares en ingresos, en 2020 rebasará los 100.000 millones.

Así lo cree la consultora IDC, que calcula que entre hardware, software y servicios de seguridad se conseguirá llegar a los 101.600 millones de dólares dentro de cuatro años. La cifra habla por sí sola, aunque es mucho más valiosa si se tiene en cuenta que supone crecer durante los próximos años más del doble que el gasto global en TI.

La mayor parte de los 73.700 millones previstos para 2016 la aportará la banca, con 6.800 millones de dólares. Por países ese honor recae en Estados Unidos, con 31.500 millones.

Donde más se invertirá será en servicios, que aglutinarán prácticamente el 45 % del gasto previsto. Unos 13.000 millones de dólares irán a parar directamente a los servicios gestionados de seguridad.

“Las empresas temen ser víctimas del próximo gran ataque cibernético o ciberextorsión. Como resultado, la seguridad se está examinando profundamente en los consejos de administración”, comenta Sean Pike, vicepresidente de programa para productos de seguridad de IDC.

¿Qué exigen esos consejo? Pike indica que el objetivo es que “los presupuestos de seguridad se usen con prudencia y las soluciones operen con la máxima eficiencia”.