¿Se pueden quedar las tecnológicas sin vía para vender?

Las grandes compañías tecnológicas no pueden permanecer impasibles ante los problemas de su canal de distribución, al que el refrán dios aprieta pero no ahoga parece que no les está dando resultado. Las firmas TIC tienen en estas intermediarias sus aliadas para hacer llegar sus productos al consumidor.
Son muy pocas las majors que utilizan la venta directa y son muy pocas las que no han salido escaldadas del intento de este método de distribución.
Las ventas están cayendo y los fabricantes lo acusan en sus resultados. La consultora IDC acaba de publicar un estudio que señala que el mercado de ordenadores personales ha caído un 10% en ventas en EMEA en el primer trimestre. Y la situación no parece ir a mejor.
En las últimas semanas, son varias las firmas que han ido cerrando sus puertas o que han anunciado recortes importantes, como ha publicado Channel Insider. En verano, la gran cadena de tiendas de informática PC City apuntaba que no iba a cerrar ninguna de sus tiendas españolas. La compañía apuntaba en positivo sus previsiones, con cifras de crecimiento del 8% “siempre y cuando se cumpla el plan de apertura de las nuevas tiendas”, como explicaban a la web de canal. Hoy, menos de un año después, la situación es completamente diferente.

La distribuidora tendrá que afrontar un cierre de ejercicio con pérdidas importantes, lo que le ha llevado a pensar en la reestructuración de su negocio y en “reforzar la compañía y darle un nuevo impulso ante el actual panorama económico”. La compañía reconocía a principios de semana que tendría que dar más peso a aquellas tiendas que generan más beneficio frente a las más deficitarias, lo que permitiría garantizar la continuidad de la enseña en España. De hecho, PC City ha estado en venta y ha tenido muchos y variados potenciales compradores, aunque por el momento la distribuidora ha preferido continuar luchando por el mercado español.

A Dios rogando y con el mazo dando…, siguiendo con el refranero español. Aunque en un primer momento la compañía no entró a valorar despidos o cierres, las últimas estimaciones daban por seguro que PC City tendrá que reducir plantilla.


Una fuente sindical había asegurado que la firma está preparando un ERE que pondrá en la calle a 260 trabajadores, que dejarán de ser necesarios cuando la empresa cierre diez de sus 41 tiendas repartidas por toda la geografía española.
La empresa ya lo ha confirmado: diez de sus tiendas echarán el cierre, lo que supondrá la pérdida de su trabajo para 215 empleados, como publica Channel Insider.

Cabeza visible

PC City no es más que la cabeza más visible y que ha llamado la atención de la prensa generalista de un problema mayor. La compañía es popular y muy identificable, ha protagonizado campañas publicitarias televisivas y masivas y es una habitual de los encartes publicitarios de los periódicos. El público la identifica rápido…, pero eso no quita que no sea más que otra en la lista de distribuidoras que están pasando por dificultades. Y peliagudas.

El mismo día en el que estallaba la noticia de la situación de PC City en España, se confirmaba la caída prácticamente sin remedio de Cofimán. La entidad estaba en concurso de acreedores y estos no aceptaron el plan de viabilidad empresarial que ya había recibido el visto bueno del Juzgado de lo Mercantil de Jaén.

El accionista y uno de los directores generales de Cofimán, Enrique López, confirmaba a Channel Insider que habían iniciado el proceso de liquidación de la compañía: el último paso antes de la desaparición de una empresa. “Ya no habían más salidas para Cofimán”, concedía entonces.

Cuter, que había formado parte de la enseña hasta 2007, tampoco está en una situación mejor. La separación no ha impedido que la firma también haya tenido que acogerse a un concurso de acreedores. La casa madre de esta empresa, el fabricante de ordenadores EDM (Electronic Devices Manufacturer) también ha entrado en concurso de acreedores, a pesar de que, y como recuerda Channel Insider, ensamblaba unos 400 ordenadores al día antes de marzo (cuando sus trabajadores se declararon en huelga).

Pero no han sido las únicas: Wellcomp se ha resentido de “unos impagos muy altos” y ha cerrado a finales de marzo.

Unos días antes, Ega Systems confirmaba que sus trabajadores estaban “en la calle” desde los últimos días de enero. “Un lunes fuimos a trabajar y nos encontramos las puertas de la nave cerradas”, se lamentaba uno de los trabajadores. El último pago de nóminas se había efectuado en octubre de 2008.

¿Puede ser el via crucis del canal uno de los nuevos problemas a los que se tendrán que enfrentar las compañías tecnológicas en este año complicado de crisis?