A fondo: Así evolucionará la infraestructura cloud este año (y los cuatro siguientes)

IDC calcula que la región EMEA ya ha aportado 1.300 millones de dólares de los 6.600 millones que se han invertido en todo el mundo para avivar este mercado durante el Q1.

El gasto en infraestructura cloud de TI, un mercado que incluye a servidores, almacenamiento en disco y switches Internet, seguirá creciendo este año, en detrimento de las soluciones más tradicionales. Durante el primer trimestre de 2016, el único para el que de momento se tienen datos, y en comparación con los resultados del Q1 de 2015, este segmento ya vio cómo sus ingresos se incrementaban en todo el mundo un 3,9 % hasta los 6.600 millones de dólares. El empuje está auspiciado sobre todo por la apuesta que las empresas realizan respecto a las soluciones de nube privada, que han llegado a mejor sus números en este inicio de año un 6,8 %. Eso sí, la infraestructura de nube pública es todavía la que más dinero aporta, hasta 3.900 millones de dólares en el primer cuarto.

La región en la que se integra España, aquella conocida como EMEA (Europa, Oriente Medio África), ha contribuido con 1.300 millones de los 6.600 millones totales. Y lo ha hecho tras crecer por encima de la media mundial, nada menos que un 17,6 %, y a pesar de ciertas dificultades que la limitan como las condiciones macroeconómicas de países como Rusia. Y es que, a pesar de los buenos augurios, la infraestructura cloud de TI está condenada a deshacer ciertos entuertos. Un reto importante al que se enfrenta la industria es la “desaceleración de la demanda en el despliegue de infraestructura de nube pública hiperescala”, tal y como reconoce Kuba Stolarski, director de investigación de Computing Platforms en IDC. A esto hay que añadir las posibles consecuencias tecnológicas del Brexit, algo que IDC todavía no ha cuantificado de froma definitiva. “Nuestro pronóstico para el Reino Unido podría ser ajustado a la baja en el siguiente trimestre”, advierte Kamil Gregor, analista de investigación en el European Infrastructure Group de IDC, ya que se “espera una ‘transición desafiante’ si el Reino Unido activa el proceso de retirada de la UE” finalmente.

Hoy por hoy, y sin descartar futuras revisiones, IDC cree que el mercado EMA puede subir hasta los 10.700 millones de dólares en 2020, “convirtiéndola en una de las áreas de mayor crecimiento para el sector de la infraestructura en Europa, en comparación con la expectativa de un mercado tradicional en estancamiento, si no en declive”. ¿Y qué pasará en el resto del mundo? Entre todos los representantes analizados, el gasto en infraestructura cloud de TI debería llegar a los 59.500 millones dentro de cuatro años. Esto quiere decir que prácticamente la mitad del gasto en infraestructura de TI será gasto en infraestructura cloud. Y no todo se debe al “boom” del cloud, sino que interviene al mismo tiempo la flojera de las opciones tradicionales, cuyo gasto disminuirá durante el mismo periodo un 1,4 %. Antes, este mismo año, las inversiones en servidores, almacenamiento empresarial y switches Ethernet para su despliegue en entornos cloud crecerá un 15,5 % hasta los 37.100 millones de dólares; y el gasto en infraestructura no cloud se contraerá un 4,4 %.

“A pesar de la debilidad de la demanda hiperescala de los proveedores de servicios cloud para productos de infraestructura de TI en el primer trimestre, se espera que el gasto en nube pública aumente durante la segunda mitad del año”, pronostica Natalya Yezhkova, directora de investigación de IDC sobre sistemas de almacenamiento. “En general, seguiremos viendo un crecimiento constante de la demanda para servicios cloud públicos”. Y es más, “la volatilidad económica y financiera que vemos en algunas regiones empujará aún más la demanda, ya que el aumento de la sofisticación de las ofertas de nube pública permite a las organizaciones satisfacer sus necesidades a través de una variedad cada vez mayor de dominios de TI, mientras que los modelos de precio orientados a OPEX proporcionan algún alivio a los apretados presupuestos de TI”. En 2016, el gasto en infraestructura cloud pública representará 23.300 millones de dólares y el de cloud privada, 13.800 millones.