Acer: “Los ‘netbooks’ hacen mejorar el mercado, pero no son la solución”

La irrupción -y la buena acogida- en el mercado de los ultraportátiles ha sido una de las principales razones por la que las ventas de ordenadores a nivel mundial no se han hundido durante estos meses de crisis económica.
Sin embargo, los fabricantes, aunque ven a los ‘netbooks’ como uno de los salvadores del mercado, también recelan de ellos. Y lo hacen en un momento en el que, tras haber experimentado una gran demanda entre los consumidores particulares, se enfrentan al reto de llevar los mini-portátiles al ámbito empresarial.
Esto se plantea con la llegada de los chip de ultrabajo voltaje de Intel (CULV), que buscan llenar el hueco existente entre los chips económicos para netbooks y los chips caros y más potentes utilizados para ordenadores.
Con la llegada de estos chips, los mini-portátiles podrían desembarcar con unas prestaciones aceptables en el ámbito empresarial, y es precisamente ese mayor rendimiento el que preocuparía a los fabricantes, ya que podría provocar que usuarios finales decidan pasarse a estos nuevos equipos con CULV, más económicos, en lugar de comprar un equipo de altas prestaciones. Esto dinamitaría el mercado, pues su precio es mucho menor, y por tanto, descendería también el margen que finalmente se llevan las empresas.
“Si puedes tenerlo fino y ligero, con más potencia y un precio normal, ¿qué comprador no va a querer eso?”, ha señalado en este sentido J.T. Wang, presidente de Acer, durante el lanzamiento del primer equipo con CULV que realiza su compañía, a la postre tercer fabricante mundial de ordenadores.
Wang lo tiene claro, los ordenadores con CULV van a encontrar rápidamente su hueco de mercado entre los consumidores que quieren altas prestaciones pero que tienen problemas con precios más elevados. Según Wang, el 15% de los ingresos de su firma este año procederán de equipos con CULV.