Adiós a las bombillas incandescentes

Australia es el mejor ejemplo, como señalan en el artículo, ya que en 2010 dicho país dejará de usar este tipo de bombillas que durante más de un siglo han iluminado nuestra vida.

No obstante, esta tecnología tiene los días contados, y parece que las bombillas fluorescentes (‘iluminación fluorescente compacta’) son la principal alternativa a esta tecnología.

En el artículo señalan que el consumo de estas últimas es notablemente inferior, además de ofrecer mayores rangos de temperatura de color.

Aún así, no todo son ventajas, ya que los fluorescentes tienen algunos ‘peros’. No se comportan bien en temperaturas extremas, no son adecuadas para ambientes húmedos (baños), y contienen mercurio, un componente que provoca residuos que habrá que tratar a posteriori.

Hay otras opciones como la iluminación mediante LEDs, y también es cierto que las bombillas de bajo consumo son también un avance muy importante respecto a las bombillas actuales.

Actualización: nuestros lectores nos han señalado acertadamente el falso mito acerca de la invención de la bombilla incandescente. Como apuntan en la Wikipedia, hubo varias versiones de este ingenio años antes de que Edison se atribuyese el mérito. De hecho, este prolífico inventor se quedó con ese honor, aunque la patente luego le fuese retirada en varios países.

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