Alierta, ¿profeta en el desierto?

César Alierta, presidente de Telefónica, hizo mucho ruido con sus comentarios de gravar a los buscadores por el uso que estos hacen de internet. La relación que mantienen con las operadoras es, según se desprende de las palabras del directivo, parasitaria.

“Los buscadores utilizan nuestras redes sin pagarnos nada lo que es una suerte para ellos y una desgracia para nosotros”, fueron sus acusaciones textuales. Alierta destapó la caja de los truenos… aunque nadie parece determinado a seguirle en la denuncia.

Las operadoras de telecomunicaciones consultadas por Silicon News poco tienen que decir. “No tenemos nada que decir”. “Sin declaraciones”. Las teleco no se pronuncian, aunque ahora que Google ha decidido entrar en el negocio de la banda ancha propuestas como éstas pueden impulsar otras ofertas.

¿Siguen las demás compañías a Telefónica? Algunos medios publicaban esta semana que las palabras de Alierta no eran más que lo que el sector quería y quiere desde hace cierto tiempo, tema que incluso ha llegado a tratarse en reuniones sectoriales. Pero aunque se diga nadie ha apoyado a Alierta públicamente.

“Hay que poner en contexto sus declaraciones”, explica el director del master in Telecom&Digital Business de la IE Business School, Ricardo Pérez. “Las hace el presidente de la única operadora de telecomunicaciones del mundo que ha conseguido cumplir sus planes de crecimiento y rentabilidad en los últimos años, que es capaz de ser rentable en mercados maduros y emergentes y que está hoy considerada una de las operadoras clave a nivel mundial”, añade.

Alguien así sin duda puede permitirse hacer grandes declaraciones. Al otro lado, los principales afectados, y por muy grandes que sean, al igual que los compañeros teleco de Telefónica guardan silencio. Yahoo! ha decidido que “por ahora” no hará ningún comentario, mientras Google no entra a hacer valoraciones sobre las declaraciones de Alierta, como explican desde los departamentos de comunicación de ambas empresas.

Neutralidad de la red

“El discurso de la neutralidad de la red es algo más que anecdótico“, explica Pérez, que recuerda que es mucho más complejo que un “poner puertas al campo”. “Los proveedores de servicios de internet por supuesto propugnan la neutralidad total de la red, no solo a nivel de permitir acceso a todas las aplicaciones, desde cualquier dispositivo y sin cerrar el acceso a nadie; otra discusión es la capacidad de discriminar tráfico”.


Cada vez los contenidos y los usos de la red requieren de una mayor velocidad de conexión, por lo que a veces las operadoras intervienen. De sobra son conocidas las quejas de algunos usuarios por la ralentización de las conexiones cuando se produce un uso intensivo de las redes P2P.

Pero no es la única ocasión en la que las operadoras reorganizan cómo se conectan sus usuarios y qué páginas se ven perjudicadas: en junio se destapaba que BT bajaba la velocidad de conexión en un horario concreto para la conexión a ciertas páginas.

“La postura de las operadoras, a la que ha dado voz Alierta, es que ante el despliegue de redes de nueva generación, con grandes inversiones por hacer, se pueda discriminar el tráfico o pedir algún tipo de compartición de ingresos“, explica el profesor de la IE Business School.

Las empresas de telecomunicaciones se ven obligadas a desarrollar redes mejores y más potentes mientras las de internet crean contenido y aplicaciones con mayor calidad: sin unos no pueden vivir los otros, y viceversa.

¿Factible?

Pero ¿es factible cobrar una cuota o un peaje a las compañías de internet? La ausencia de declaraciones no permite saber de forma oficial saber si los afectados están dispuestos a aflojar el bolsillo.

La idea puede provocar desajustes si se hace de forma desordenada”, apunta Ricardo Pérez. “La clave, como siempre, está en jugar con un equilibrio entre derechos y obligaciones de las empresas de telecomunicaciones, entre una regulación que intenta proteger la igualdad y el desarrollo de internet”.

“No se debe olvidar que uno de los criterios clave para esta nueva sociedad es el acceso a información es la capacidad de tener empresas fuertes que puedan facilitar este tipo de infraestructuras a precios competitivos”, alerta.

¿Se habrán cansado las operadoras de invertir y habrá llegado la hora de los otros? Tiempo al tiempo.
Los principales perjudicados podrían ser los consumidores. Un peaje para los buscadores quizás diese lugar a la aparición de productos de pago donde aún todo era gratis. Silicon News ha intentado averiguar que piensan los potenciales afectados. La asociación de consumidores FACUA no se pronuncia, está analizando el tema.