Apple abre en Taiwán una planta secreta (ya no tanto) para fabricar nuevas pantallas

Los destinatarios de estas nuevas pantallas serían los iPhone, iPads y Macs de próximas generaciones, aunque no se ha facilitado más información al respecto por obvios motivos.

Apple habría reclutado personal procedente del fabricante local de pantallas para dispositivos electrónicos AU Optronics y Qualcomm, siendo esta última uno de los habituales contratistas de ensamblaje de componentes de la manzana mordida.

Se rumorea que Apple está interesada en adentrarse en la tecnología OLED de diodos orgánicos, que permiten el desarrollo de pantallas más delgadas que las actuales y que además no necesitan de una reatroiluminación que además de permitir un menor consumo energético contribuye a obtener pantallas de menor grosor, algo esencial en dispositivos móviles.

Disponer de una fábrica propia permitirá a Apple reducir su dependencia de otros grandes fabricantes como Samsung, LG, Sharp y Japan Display, además de poder controlar de manera más férrea la fabricación de pantallas, contando además con la participación de otros ensambladores de menor tamaño con los que trabaja actualmente como Auoptronic o Innolux.

Por el momento el secretismo mencionado se debe a la ausencia de información exterior que desde las instalaciones de esta planta indiquen que se trata de  una empresa relacionada con Apple. Tan solo cuando alguien se adentra en las instalaciones y accede al área de recepción de visitantes podrá ver un logo de discreto tamaño en la pared interior.

vINQulo

Bloomberg