Apple dejará que los desarrolladores creen software para el iPhone

Apple, que la pasada semana anunció la
fecha definitiva del lanzamiento del iPhone en Estados Unidos para el próximo 29
de junio, podría permitir que los desarrolladores externos creen programas para
su teléfono, medida que serviría para ampliar el atractivo de su teléfono entre
el público.

La noticia, adelantada por
Bloomberg,
podría ser confirmada hoy por el CEO de la firma, Steve Jobs, en la conferencia
global de desarrolladores que la compañía celebra estos días en San Francisco
(EE.UU), un encuentro anual que reunió la cifra récord de 4.200 asistentes el
pasado año. Paralelamente, en el evento, de cinco días de duración, Apple está
dando a conocer Leopard, la última versión del software para ordenadores Mac.

El sistema operativo de Mac, bautizado como OS X, también se instalará en el
iPhone, un dispositivo que aúna las funcionalidades del reproductor de música
iPod y de un teléfono móvil. Se da el caso de que, para crear programas para el
iPhone, los desarrolladores externos a la compañía necesitan el permiso de ésta,
y Jobs podría concedérselo en breve, según afirma Guy Kawasaki, fundador de
garage.com, una consultora start-up
tecnológica.

“Hay tantos desarrolladores de Mac que se convertirían en evangelistas del
iPhone que sería sencillamente una locura no dejar que esta gente popularice el
producto y cree aplicaciones para él”, afirma Kawasaki, quien en el pasado fue
el ejecutivo de marketing de Apple que fomentó programas externos para Mac,
cuando fue presentado en 1984.

Las previsiones para este teléfono pasan por unas ventas de 10 millones de
unidades en 2008, que darían a la compañía una cuota del mercado de teléfonos
móviles del 1%, de acuerdo con el CEO de Apple, Steve Jobs. Además, el
responsable afirmó durante una conferencia el pasado mes de mayo que espera que
este producto se convierta en el tercero más importante de la firma, junto con
el Mac y el iPod, que generan cada uno en torno a 10.000 millones de dólares
anuales en ventas.

Indirectamente, Jobs señaló además que podría dar marcha atrás en su postura
de que permitir a desarrolladores externos la creación de programas para el
iPhone podría comprometer su seguridad.

“Encontraremos una vía para que terceras partes puedan desarrollar”
programas a la vez que mantenemos la seguridad del iPhone, afirmó Jobs en una
conferencia tecnológica el pasado 30 de mayo. “Si son un poco más pacientes con
nosotros, creo que todo el mundo podrá obtener lo que quiere”, concluyó el
directivo.

Apple planea vender dos modelos diferentes del teléfono, una versión de 4 GB
por 499 dólares, y una de 8 GB por 599 dólares, ambas operadas por
AT&T, la mayor
compañía de telefonía móvil de Estados Unidos. Entre sus mayores novedades, este
dispositivo destaca por su pantalla táctil, que sustituye al clásico teclado
numérico, y permite a los usuarios navegar por Internet y acceder a servicios de
correo electrónico.