Consejos para optimizar la experiencia del usuario móvil

El tráfico de internet a través de dispositivos móviles se ha disparado en los últimos años. ¿Cómo lograr que la experiencia del usuario móvil sea óptima?

El ‘boom’ de los smartphones y el aumento de la velocidad de conexión gracias al paulatino desarrollo de la tecnología 4G han sido factores esenciales para el auge del internet móvil y del mcommerce.

El pasado mes conocíamos que la penetración del internet móvil en todo el mundo se ha duplicado en el último lustro, pasando del 11% en 2011 al 36% que se registra actualmente, según informaba The Next Web.

A la par, el mcommerce no para de crecer. Y todavía tiene mucho recorrido por delante. Según la consultora Ovum, el número de internautas que comprará a través de sus dispositivos móviles alcanzará la cifra de 2.070 millones de personas en 2019, generando un negocio de 693.360 millones de dólares. Es decir, cuatro veces más compradores y trece veces más facturación que en 2014.

No se puede desdeñar un crecimiento tan espectacular, por lo que es imprescindible adaptarse para mejorar la experiencia del usuario móvil. Liferay, plataforma de open source para la creación de experiencias digitales, ofrece algunos consejos. El primero de ellos se centra en la importancia de conocer al usuario, estudiando sus características demográficas, así como la información procedente de bases de datos ya existentes, en caso de disponer de ellas. Además, se necesita saber otras cosas, como qué dispositivos utilizan los usuarios, de dónde provienen las visitas, cuándo se van, etc. Por ejemplo, si se observa que no interactúan con la página de inicio, aun teniendo un buen diseño, quizá convenga revisar el contenido.

Liferay también recomienda establecer objetivos. Hay que definir qué se desea que hagan los usuarios cuando lleguen a la web y a dónde queremos que se dirijan. La mejor manera de conseguirlo es poniéndose en el lugar del internauta, tratando de prever sus acciones y pasos, con el fin de asegurarse de que la experiencia del usuario sea la deseada. Esto ayudará a mejorar los porcentajes de abandono, la ratio de engadgement, etc.

También hay que prestar mucha atención a los contenidos, definiendo el mensaje que se quiere transmitir sobre la marca, producto o servicio. Es muy importante tener en cuenta el público objetivo al que nos dirigimos, adaptando temas, lenguaje, etc. Además, conviene emplear una tecnología que permita mostrar el contenido adaptado a las necesidades de los visitantes.

La compañía recuerda que hay que presentar esos contenidos de forma atractiva y sencilla. Así, la estructura y diseño de las interfaces de usuario son fundamentales. Y el diseño ‘responsive’ es esencial, pues permite ofrecer los contenidos adaptados a todo tipo de dispositivos móviles. Además, es importante tener en cuenta la omnicanalidad, es decir, la integración de canales, ya que hace posible la interactuación del usuario desde cualquier tipo de soporte. Por ejemplo, puede conectar desde el móvil y luego continuar en el PC, retomando el proceso donde lo dejó, ofreciéndole una experiencia continua y consistente.

Por último, se recomienda realizar continuas pruebas y mejoras, partiendo de un análisis de rendimiento que aporte información acerca de la implementación, la satisfacción de objetivos, etc. Hay que hacer todos los cambios oportunos y, en algunas ocasiones, incluso habrá que modificar el diseño para impulsar el rendimiento.