¿Cuál es el plan B de Nokia?

El fabricante finlandés asegura contar con “un plan de contingencia” en caso de que Windows Phone no cumpla las expectativas del mercado y su asociación con Microsoft fracase.

Mientras Research In Motion mira hacia Windows Phone como posible tabla de salvación tras el nuevo retraso que va a sufrir su sistema operativo BlackBerry 10, Nokia asegura estar preparada para salvarse de la quema si su asociación con Microsoft sale mal.

Durante su intervención en un programa de la televisión finlandesa, de la que se hace eco CNET, el presidente del consejo de Nokia, Risto Siilasmaa, ha declarado que su compañía cuenta con “un plan de contingencia” en caso de que la evolución de Windows Phone 8 “no esté a la altura de nuestras expectativas”.

Aunque no ha especificado demasiado en qué consiste tal plan, el directivo sí ha descartado que en caso de que las ventas no terminen de remontar la firma vaya a enfocar sus esfuerzos en desarrollar su propio sistema operativo. A ese respecto, Siilasmaa ha recordado que la cuota de mercado de Symbian es prácticamente inexistente.

¿Qué queda entonces? Una posible apuesta por Android. Y es que a pesar de que el ecosistema del androide verde está cada vez más saturado y compuesto por fuertes competidores como Samsung y HTC, también es cierto que su flexibilidad para crear plataformas personalizadas y dirigirse a diferente escalafones de mercado está haciendo aumentar su éxito entre los usuarios.

Otra solución alternativa sería enfocarse en el tema de las patentes. La compañía finlandesa cuenta con una cartera de 30.000 títulos de propiedad intelectual que, según las estimaciones de los analistas, está valorada en nada menos que 14.000 millones de dólares. Llegada la hora, Nokia podría optar por negociar acuerdos de licencia o vender parte de su patrimonio.

De momento y tan sólo en el último año, el valor de las acciones de Nokia se ha reducido un 60%.