Los cibertaques cuestan a algunas empresas más de 770.000 euros

Kaspersky Lab calcula que, de media, los presupuestos empresariales para seguridad sólo soportan 2,5 ciberataques, contanto pérdidas directas e indirectas.

¿Cuánto le cuesta a las empresas un ciberataque? Esta respuesta dependerá de qué tipo de empresa estemos hablando en cada situación. De su tamaño y de su preparación. Pero las cifras de impacto existen.

Según datos de Kaspersky Lab y B2B International, un único incidente costará a una pyme más de 77.000 euros, unos 77.372 euros concretamente. Para las de gran tamaño las pérdidas ascienden a los 770.252 euros.

Alfonso Ramírez, director general de Kaspersky Lab Iberia, indica que además “el tiempo de reacción tras una brecha de seguridad tiene un impacto directo en las pérdidas financieras”. Por ejemplo, si tarda al menos una semana en descubrir el problema, una pyme acabará pagando un 44 % más. En el caso de las grandes el recargo se sitúa en el 27 %. “Esto es algo que no se puede evitar con un incremento de presupuesto”, valora Ramírez. “Se necesita talento, inteligencia y agilidad para proteger el negocio”.

De todos modos, las compañías prevén que sus presupuestos de seguridad TI aumenten un 14 % en los próximos tres años. Las más pequeñas destinan menos del 20 % del dinero que manejan a este tema, mientras que las de mayor volumen dirigen a estos esfuerzos algo más de una quinta parte. Las diferencias se amplían si se tiene en cuenta que el presupuesto anual de las de menor tamaño ronda los 900 euros, frente a más de 1 millón en las grandes corporaciones.

El responsable de Kaspersky Lab Iberia advierte de que “los presupuestos en seguridad TI sólo ‘podrían soportar’ de media 2,5 ciberataques, siempre y cuando las pérdidas directas e indirectas se tengan en cuenta”.

“Con miles de amenazas atacando al mundo corporativo cada día, invertir en una ciberseguridad eficiente merece la pena”, comenta el directivo. “Las compañías saben entender claramente la amenaza”. Y es que “un 59 % de las pymes y un 62 % de las grandes empresas afirma que mejorará su seguridad, independientemente de la capacidad de medir el retorno”.