Culebrón PT-Telefónica: ¿nuevas negociaciones a la vista?

Parece ser que la decisión de Telefónica de retirar su última oferta (7.150 millones de euros) por el control de Vivo está trayendo numerosos quebraderos de cabeza. La petición de Portugal Telecom de alargar el plazo para decidir la venta de Vivo fue la gota que colmó el vaso y la operadora española no le ha quedado más remedio que actuar: Telefónica apuesta por la disolución de Brasilcel.

Para ello la operadora ha movido ficha y ha contratado al despacho holandés De Brauw Balckstone Westbroek para interponer una denuncia ante el Tribunal de Arbitraje de La Haya que disuelva Brasilcel y ponga fin a los problemas entre ambas compañías.

Con la disolución de Brasilcel Telefónica podría comprar más acciones de Vivo en la Bolsa de Brasil en un intento por hacerse con el control, pero los analistas no tienen claro que ésta fuese una vía de escape para finalizar el problema y hacerse con el control de la brasileña, pudiendo alargarse meses e incluso años.

Según un informe del banco francés Natixis, la disolución de la brasileña sería el escenario “más problemático” para la compañía lusa, al no contar con las medidas necesarias “para contrarrestrar una oferta por Vivo”, según publica EP.

Con respecto a la disolución de Brasilcel, Portugal Telecom no quiso hacer ningún tipo de declaración hasta el momento, pero el presidente ejecutivo Zeinal Bava señaló el pasado mes la imposibilidad de Telefónica de disolver Brasilcel unilateralmente, según sus abogados. Lo que sí barajan PT y el Gobierno luso es solicitar a Telefónica que reanude las negociaciones encaminadas a resolver de forma definitiva la venta de la operadora brasileña Vivo, según informaban hoy EP fuentes cercanas a la negociación.

El Gobierno español no intervendrá en el caso

El Gobierno español sigue sin decantarse ni participar en el affaire por el control de Vivo. El secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, Francisco Ros, ha descartado hoy la mediación del Gobierno español entre Telefónica y Portugal Telecom, ya que el proceso “está teniendo lugar en el contexto en el que tiene que tener lugar, que es entre compañías”.

Ros señalaba hoy que la mediación no era necesaria ya que en este caso hay interlocución entre ambas compañías. “Hay una interlocución muy fluida y lo que hay es que dejar que actúen y que dialoguen y lleguen a acuerdos”, señaló.

¿Logrará Telefónica disolver Brasilcel finalmente? Todo se andará pero aún queda mucho camino que recorrer en las negociaciones entre ambas compañías.