Entre los componentes que se encuentran en esa familia de minerales destaca el Tulio, que se emplea para las máquinas de rayos X portátiles, el holmio, utilizado en algunos láseres o el lantanio, que se incluye en lentes fotográficas.
Otros elementos que pertenecen a las denominadas “tierras raras” se utilizan en productos como el iPod, las turbinas eólicas o los coches eléctricos.
Ahora, la principal limitación con la que se encuentran los japoneses radica en los costes y viabilidad para llevar a cabo la extracción, pero si logran solucionarlo, en breve estarán en condiciones de comercializar esos minerales.
Lo importante del hallazgo es que de llevar a buen puerto la extracción de las “tierras raras”, el país nipón haría la competencia en ese terreno a China, que es el país que domina la producción mundial con un control que oscila entre el 90 y el 98 por ciento, y seguramente se frenaría la escalada de precios de esos materiales.
vINQulos
Wired