Disney quiere hacernos olvidar el DVD

La tecnología tiene como nombre clave Keychest, y parece estar dirigida a la forma en la que el usuario es propietario de los contenidos, y no tanto a su posesión física. La idea es la de permitir a los clientes pagar un precio para el acceso permanente a una película o episodio de una serie televisiva.

Ese coste implicaría la posibilidad de poder transmitir ese contenido a múltiples plataformas y dispositivos. Disney está mostrando Keychest a otros estudios cinematográficos y a empresas tecnológicas para evaluar su implantación, y podrían presentarla públicamente el mes que viene.

vINQulos

WSJ