“La división anula todas las especulaciones sobre compras y fusiones”

Es decir Motorola y rápidamente asociarlo a telefonía móvil. La compañía estadounidense, una firma que comenzó su andadura en los años 30, lleva en el sector de la telefonía móvil desde sus inicios. Lo que entonces parecían enorme ‘walkie talkies’ de uso militar se han convertido en sofisticados artículos de primera necesidad. Un suculento mercado de más de un billón de unidades que en los últimos meses ha registrado la entrada de empresas de Internet que quieren sobrepasar la barrera de los soportes para diversificar sus ingresos publicitarios. “No hay ningún otro producto de consumo que se venda tanto como telefonía móvil, nada”, afirma de forma rotunda Miguel Torres, presidente de Motorola España.
Torres recibe al equipo de Silicon News en su despacho de Madrid, en un momento de incertidumbre para la compañía que, tras un aciago 2007 acaba de anunciar la división de la compañía en dos empresas: telefonía móvil por un lado, y redes de telecomunicaciones por otro. En todo momento reconoce que han llegado a perder la segunda posición del sector a nivel mundial en favor de Samsung por un fallo grave en la elección del portfolio para EMEA y Asia, pero del mismo modo afirma que “no hay que sacar las cosas de quicio”, mostrando su confianza en la fuerte presencia de marca de la compañía y en la gestión que el CEO Greg Brown está llevando a cabo para volver a las cifras de hace 15 meses.
 
– ¿Cuál es la situación actual que vive Motorola tras el anuncio de la división de la compañía en dos unidades de negocio?

El anuncio de la división en dos empresas que coticen separadas viene a confirmar lo que Motorola ya anunció en enero. Básicamente lo que se está buscando es maximizar el valor de las acciones. Que se juzguen a las diferentes empresas por su rendimiento y potencial, ya que creemos que el mercado no está valorando correctamente a la empresa.

– Entonces, ¿cuál es la hoja de ruta que maneja la empresa? ¿Se está a la espera de alguna oferta?

No, no, si no es un tema de oferta. El anuncio lo que dice es que Motorola se va a separar en dos empresas. Eso elimina todas las especulaciones que ha habido sobre compras y fusiones. Lo que se va a hacer es distribuir esa nueva empresa que salga entre los accionistas actuales. No es una compra ni una venta, simplemente se trata de optimizar la forma en la que estás presente en el mercado de valores.

Ése es el objetivo, ya que si miramos ahora a las unidades de negocio de la empresa que no son telefonía móvil están creciendo a un ritmo del 10 por ciento o más. Son divisiones muy rentables que deberían tener una valoración mucho más positiva en el mercado.


– Pero los móviles son el buque insignia de Motorola…

Sí, es cierto. Buscamos dar un enfoque mayor a la empresa de telefonía móvil. Tendrá su CEO independiente, una estructura de capital más adecuada al tipo de negocio que lleva, etc. Es lo que más se ve, y eso hace también que al separarnos en dos unidades de negocio los accionistas vayan a saber qué hace una u otra empresa. Porque las unidades de negocio de ‘Home and Network Mobilities’ y ‘Enterprise Mobility Solutions’ estaban un poco tapadas

– ¿No se baraja la posibilidad de una ‘joint venture’ del tipo Sony-Ericsson, u orientar el modelo de negocio hacia los servicios como últimamente está haciendo Nokia?

No, no tiene dada que ver con eso. Es simplemente buscar en esta división una estructura para que el mercado nos valore adecuadamente y, al mismo tiempo, tener las manos libres para sacar adelante el negocio.

– ¿Y qué sucede si llega una buena oferta? ¿No se escucharía?

Sinceramente, que yo sepa no ha llegado ninguna oferta por nada, pero ése no es el objetivo de Motorola, para nada. No se está buscando colaboración con ninguna empresa. Eso no quiere decir que luego dentro de seis meses pueda haber una alianza con alguien. Ahora bien, ¿qué le aportaría cualquier fabricante a Motorola? Nada; ni marca ni tecnología.


– ¿Cuáles han sido las causas que han llevado a Motorola a esta situación de crisis?

Tampoco podemos sacar las cosas de quicio. No es que se esté exagerando porque la situación es la que es y el mercado nos está penalizando mucho, pero somos el número tres del mundo, tenemos una cuota de mercado envidiable, y seguimos gozando de una presencia de marca muy importante.
Estamos hablando de una unidad de negocio en la que somos el tercer fabricante a nivel mundial, el número uno en Estados Unidos, el número uno en Latinoamérica, ¿Por qué hemos llegado a un momento duro como éste? Porque hemos fallado en la elección del portfolio para unas regiones que son muy importantes como son Europa, Oriente Medio y África (EMEA) y Asia.

¿En qué hemos fallado? En no tener teléfonos 3G de gama media y gama baja, tras lo que hemos registrado un descenso brutal en nuestras ventas porque es lo que han empezado a demandar los operadores en 2/3 del mundo. Y eso ha hecho que tengamos unos números muy bajos, que se hayan reducido muchísimo las ventas en estas dos regiones. Algo que no se puede solucionar de un día para otro, lleva un tiempo renovar y modificar tu portfolio para adecuarlo a lo que quieren los operadores.

– ¿Y qué análisis se hace de ese descenso de las ventas?

A posteriori es fácil juzgar las cosas. No hemos estado muy acertados en preveer lo que querían los operadores, así como el cliente final. Porque son los operadores los que promocionan que el teléfono sea 3G más que los usuarios. Tanto en EEUU como en Latinoamérica los servicios 3G no están al mismo ritmo ni por asomo al de Europa, y los operadores no están apostando por eso. Por contra, todos nuestros competidores grandes cuentan con gama media-baja de 3G.

– ¿Y cuáles son las prioridades que va a tomar Motorola para darle la vuelta a este panorama?

Sin duda alguna, los objetivos son renovar nuestro portfolio y volver a tener los números de hace un año y medio. Pero la situación financiera de Motorola, a diferencia de situaciones que hemos visto con Sony-Ericsson o Siemens, es super saludable, extremadamente saludable. Hasta tal punto que parte de los rumores que existen es porque es una empresa que es muy atractiva ahora mismo por el valor tan bajo que tiene para una posible compra o fusión.

Y son esos recursos los que te permiten renovar tu portfolio. Además, en cuanto a reconocimiento de marca los estudios nos siguen diciendo que somos el número dos en el punto de venta, y eso es un activo fundamental para volver a los números en los que estábamos en esa unidad de negocio

– ¿Qué es lo que ha sucedido en España? ¿Cuáles son las previsiones para este año?

En España hemos estado viviendo unos años muy buenos, el teléfono ha sido durante mucho tiempo uno de los elementos de batalla de los operadores. A los españoles les gusta cambiar de teléfono muy a menudo y tener el último modelo. Y eso ha hecho de España un mercado muy grande y atractivo. Pero debido a los problemas ya explicados hemos registrado una muy fuerte bajada de ventas, y hemos pasado en 15 meses de movernos en los veintes bajos a ahora estar alrededor del 9-10 por ciento de cuota de mercado (ver noticia).
Lo que estamos viendo este año es un pequ
eño descenso. Es demasiado pronto para analizarlo, pero los primeros indicios dicen que el Q1 ha sido más flojo que el año pasado. Pero aún así en el negocio de la telefonía móvil sigue en crecimiento. A lo mejor es que el año pasado fue demasiado alto.


– Se dijo que Motorola iba a empezar a remontar en el primer trimestre del año, pero de momento no se está cumpliendo y la desaceleración se está convirtiéndo en recesión. ¿Para cuándo se espera la recuperación de la empresa?

Yo creo que a partir del tercer trimestre vamos a empezar a subir, y eso nos hará ver el 2009 de forma muy optimista. La recesión al final se puede notar en que la gente se gaste menos dinero en el móvil, que crezca el tiempo de renovación del móvil… podría ocurrir. Pero no es algo que tenga un impacto tan inmediato.

– Pero el equipo directivo necesita estabilidad para enderezar el rumbo, y la crítica constante que está llevando a cabo el inversor Carl Icahn parece no ayudar mucho…

Sí, pero él critica pero por otro lado está comprando (ver noticia), y este tipo de personas tontas no son. Él ve un potencial en la empresa. En cierta medida es comprensible que un accionista grande critique y presione a la directiva cuando es dificil de entender por qué un negocio que tenía una línea ascendente está pasando la crisis que está pasando. Cualquiera estaría un poco enfadado, pero eso no quiere decir que él no tenga confianza en el grupo directivo actual y en las decisiones que se están tomando.

Sin ninguna duda el cambio de Ed Zander a Greg Brown va a ser muy positivo. Brown ha estado liderando otras unidades de negocio y las ha renovado completamente. Y está haciendo lo mismo con la división de telefonía móvil.

– Respecto a la inminente llegada del iPhone a España, ¿qué espera Motorola de su entrada en España? ¿Va a suponer un antes y un después para el mercado?

El iPhone juega en un nicho pequeño, y habrá que preguntarles cuál es su estrategia, si van a competir como los grandes fabricantes de telefonía móvil con un portfolio grande o si van a ser un RIM. La fabricante del Blackberry puede estar preocupada con que le vayan a quitar cuota de mercado, pero no creo que vaya a tener una influencia en el sector. Lo que pasa es que en Apple, más allá de que te guste el diseño o no te guste, son unos monstruos en el tema del marketing.

– ¿Qué hay de la participación de la empresa en la Open Handset Alliance?

Tenemos un acuerdo con Google, y tendremos a finales de año un móvil con Android. Pero en cuanto a sistemas operativos, Motorola siempre ha sido bastante agnóstica, tenemos teléfonos con todos los SO: Linux/Java, Symbian, Windows Mobile… La estrategia es, dentro de un límite, tener una cierta variedad.

– ¿Dónde se ve Motorola dentro de 12 meses?
Veo a dos empresas, una de ellas con una situacion muy positiva porque tiene una posición muy fuerte en las tres unidades de negocio que la van a formar, y otra que ya para ese momento estará mostrando que está en el camino adecuado para recuperar la posición que ha tenido.