El iPhone 5 gusta pero no sorprende, ¿por qué?

La presentación del más nuevo teléfono de Apple ha cumplido con las expectativas de los usuarios, pero ha estado falto de factor sorpresa al que se les había acostumbrado.

Apple presentó ayer su nuevo iPhone. Es más fino, más ligero y más rápido (el más rápido del mercado, según afirman en Cupertino). Todo esto no da lugar a decepciones; es un dispositivo mejorado y muy competitivo que además, se mantiene a un mismo precio.

Pero se echó en falta, además de la incorporación de tecnología NFC o la carga inalámbrica, el factor sorpresa. Faltó aquella exclamación general, e inconscientemente sincronizada de un “oohhh” entre el público del Yerba Buena Center of Arts. Es esta la reflexión que hacen numerosas cabeceras hoy, día de resaca post iPhone 5.

Pero esta falta de sorpresa, sobre todo en el caso de Apple es absolutamente normal. Cuando finalizó la presentación del iPhone 4S, cuya gran novedad fue Siri, los rumores sobre el próximo dispositivo móvil de la manzana ya empezaron a circular por la red.

En los últimos meses muchas fuentes anónimas provenientes del canal de suministro, de personas “cercanas a Apple” o directamente involucradas en el proceso de construcción del teléfono han ido informando sobre las nuevas características que incorporaría.

A nadie ha sorprendido que el iPhone 5 sea más alto y delgado y que su pantalla haya crecido. Era un paso casi natural que debía de dar Apple, en la medida que el contenido multimedia se convierte en el core de la experiencia móvil de usuario.

Tampoco sorprende que incorpore un procesador más rápido (había que mejorar lo que ya está en el mercado) ni mucho menos que se ejecute con iOS 6, versión mejorada y a punto de estrenarse del sistema operativo.

En definitiva, el iPhone 5 incorpora las características esperadas y que Apple debía incluir, casi por obligación. Esta falta de sorpresa no se debe a una falta de innovación y hay que mirar más a la constante presencia de Apple en los medios y a sus competidores para entenderlo (sobre todo el Galaxy S III de Samsung).