¿Cómo ha ido creciendo el protagonismo de Zuckerberg en la política de EE.UU?

Estos días, el fundador de Facebook ha dado al gobierno sus consejos sobre una mejor comunicación en el caso PRISM y persigue nuevas conquistas legislativas de la mano de su lobby tecnológico FWD.us.

Desde su primera visita a Washington hace tres años, Zuckerberg parece tener una mayor posición de poder en la capital del país. No en vano, el crecimiento de su empresa se ha duplicado -los usuarios de Facebook han pasado de 500 millones a 1.000 millones- y la compañía ahora cotiza en bolsa.

En sus avances en las relaciones con el gobierno, Zuckerberg ha enarbolado este año la creación de un lobby tecnológico, Forward U.S (FWD.us), dedicado a la promoción de “políticas para mantener a EE.UU y sus ciudadanos competitivos en una economía global“.

Hasta ahora, FWD.us ha dirigido sus pasos, sobre todo, hacia la reforma de inmigración, aunque los objetivos del grupo también incluyen la mejora de la educación STEM y el aumento de los fondos disponibles para la investigación científica.

Así, Zuckerberg se ha posicionado como un líder de estos temas nacionales, usando su propia celebridad, el respaldo de una larga lista de figuras notables de la industria tecnológica estadounidense y promoviendo la inversión de dinero apalancado de Silicon Valley.

Su protagonismo también se ha dejado notar estos días con el polémico caso de espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU (NSA) en torno al Programa PRISM.

Zuckerberg ha querido dar consejos al gobierno sobre una mejor forma de comunicación, afirmando que “la Administración ha hecho esencialmente un mal trabajo a la hora de explicar a los usuarios indignados sus programas de la NSA”, como recoge The Atlantic.

Resulta irónico que Zuckerberg critique ahora la falta de transparencia del gobierno.

Facebook, durante gran parte de su historia, ha recibido multitudinarias quejas de los usuarios en torno a la violación de su privacidad. A menudo, la red social ha sido la que se ha encontrado en este lado de la balanza, el de tener que “comunicar mejor” sus prácticas abusivas.

Pero Facebook va aprendiendo y la compañía ha adaptado una filosofía de lo público con la que se ha convertido en un experto acerca de compartir estrategias, como ha indicado su CEO a The Atlantic.