Empleados y fuga de datos: desde ex trabajadores de AMD al caso Snowden

Los diferentes motivos que traen consigo la fuga de datos en las empresas. Cuando son los trabajadores los implicados en la pérdida, hay cuatro perfiles principales.

Casi la mitad de las empresas españolas han sufrido una fuga de datos por culpa del comportamiento de sus empleados según un reciente estudio de Kaspersky.

Esto indica que ni las sólidas infraestructuras TI, ni las potentes medidas antivirus protegen a las empresas del todo. ¿Qué hacer cuando el eslabón que falla es el trabajador? Para Ramsés Gallego, evangelista y analista de Quest Software, la respuesta es formación. Invertir en formación salvará a empresas de disgustos.

Pero realmente existen diferentes motivos que traen consigo la fuga de datos en las empresas. Cuando son los trabajadores los implicados en  la pérdida, hay cuatro perfiles principales:

– Empleados ambiciosos. Es el caso de ex trabajadores de la compañía de chips AMD, que se llevaron a su nueva empresa (uno de los principales competidores en el segmento de gráficos, Nvidia), más de 100.000 archivos confidenciales. ¿Buscaban una bonificación por llevar esta valiosa información?

– Empleados rencorosos. El perfil de aquellos trabajadores que son despedidos de una empresa y que llevan a cabo su vendetta personal. Son propensos a divulgar información confidencial o manchar la reputación de sus ex empresas revelando datos.

– Empleados despistados. El perfil al que muy probablemente hace referencia el estudio de Kaspersky citado al inicio. Cometen errores en la gestión de información por despiste o por falta de formación.

– Empleados moralistas. Bradley Manning y Edward Snowden son los ejemplos representativos. Ambos filtraron información altamente secreta. La razón tras sus actuaciones ha de unirse al propósito de informar sobre los oscuros movimientos de la alta diplomacia. Tras la filtración sobre el espionaje de la NSA de Snowden hay una razón ética. El ex empleado de la CIA ha declarado recientemente que no quiere “vivir en una sociedad que hace este tipo de cosas”.