En 2020 podría haber 700 millones de hogares conectados

Frente a los 100 millones o 200 millones de hogares de este tipo que se calcula que existen a día de hoy, Gartner cree que en cinco años se subirá a un mínimo de 500 millones y a un máximo de 700 millones.

El mundo se dirige hacia los 700 millones de hogares conectados, que se servirán del poder del Internet de las Cosas o esa red de dispositivos inteligentes que se encuentra en pleno proceso de expansión.

Así lo cree Gartner. Esos son sus cálculos más potentes, aunque dicha consultora también concede que en 2020, que es la fecha fijada para ver ya reflejado el cambio, el mundo se podría quedar todavía en 500 millones.

Esto hay que compararlo con la situación actual en la que se calcula que existen entre 100 millones y 200 millones de hogares de este tipo.

El potencial es grande porque las opciones también son diversas. “Las numerosas aplicaciones IoT para el hogar incluyen cocinas inteligentes, que te indican cómo cocinar una comida y proporcionan recetas; y lavadoras y secadoras inteligentes, que te ayudan a determinar el momento óptimo para realizar una carga de ropa”, recuerda Paul O’Donovan, analista principal de Gartner.

“A esto se añade la iluminación inteligente, que se puede operar de forma remota y programada para atenuar o activar o desactivar en determinados momentos; los termostatos, que pueden poner el lugar en el que vives a la temperatura deseada cuando entras por la puerta; y dispositivos de entretenimiento, que pueden transmitir la programación a tu pantalla cada vez que quieras verla”, continúa O’Donovan.

Aquí entra en escena la necesidad futura de buscar compatibilidades entre diferentes dispositivos, vendedores y sistemas operativos.

“Muchas de las aplicaciones IoT se activan por sensores y necesitan gestión de datos, pero no hay un solo gateway IoT para el hogar“, indican desde Gartner. Al menos de momento.

Esta consultora, y en particular Paul O’Donovan, dice que “los ISP serán los primeros ganadores en la batalla”, esto es, “siempre y cuando desarrollen soluciones o se asocien con fabricantes”. Mientras que “los proveedores de telefonía móvil obtendrán una parte más pequeña de este mercado”. Y es que “al final el modelo celular no tendrá suficiente ancho de banda como para competir con la solución ISP”, vaticina este profesional.