Endesa ensaya en Málaga las redes eléctricas inteligentes del mañana

Las ciudades del futuro serán inteligentes, pero no sólo en su gestión de tráfico o en el día a día en sus empresas. La electricidad será también inteligente.

“La red eléctrica actual con las tecnologías de la información será la red eléctrica del futuro”, ha asegurado esta mañana José Casas, subdirector general de Estrategia, Regulación, Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible de Endesa. Casas era uno de los ponentes de la VIII Jornada de Responsabilidad Corporativa para la Alta Dirección de Empresa, TIC y Sostenibilidad, que hoy se celebraban en Madrid.

Casas ha hablado de la última aventura de la eléctrica: Endesa ha convertido a Málaga en su ciudad piloto para la electricidad inteligente. La ciudad andaluza acoge al consorcio Smartcity, que lidera la firma, y que está testeando como serán las redes eléctricas del futuro.

Málaga fue elegida, según explicaba Casas a los asistentes, porque reunía las características técnicas necesarias, contaba con un número significativo de grandes clientes y con un parque interesante de clientes jóvenes y concienciados y además aportaba un decidido apoyo gubernamental. “Que yo sea de Málaga no tiene nada que ver”, bromeaba Casas con los asistentes.

Endesa es la capitana de la aventura, aunque no está sola. IBM apoya la inicitiva, al igual que Mitsubishi, que firmaba hoy su participación. Esta última compañía se lanzará a la movilidad eléctrica.

La smartcity malagueña cuenta con un fondo de 30 millones de euros para su desarrollo. El objetivo no es únicamente ser más verde sino también más eficiente. Se trata de conseguir un ahorro energético del 20%, una reducción de las emisiones de 6.000 toneladas de CO2 al año y un aumento del consumo de energías renovables en la localidad.

De hecho, y como curiosidad, las farolas de Málaga pasarán a estar alimentadas por energía eólica, lo que llevará a renovar el parque de farolas para incorporar las herramientas necesarias. En agosto, las primeras farolas eólicas llegarán al paseo marítimo de la localidad.

300 clientes industriales, 900 de servicios y 11.000 clientes domésticos del área de la Playa de la Misericordia serán los primeros en probar la energía inteligente.