Un experto investigará si la tecnología de coches autónomos de Uber fue robada a Google

Un tribunal ha ordenado una investigación tras considerar convincentes las alegaciones de la división de coches autónomos de Google.

La lucha en los tribunales entre Uber y Waymo, la empresa de Google que gestiona su negocio de coches autónomos, está viviendo una importante batalla judicial.

El objetivo del proceso es determinar si Uber se benefició de secretos confidenciales de Waymo en su negocio de coches autónomos, una posición que sostiene Google en su demanda.

El tribunal que analiza el caso considera que hay indicios de que Uber pudo actuar de manera ilegal, y ha ordenado que se produzca una investigación para poder salir de dudas sobre el tema.

Desde Uber niegan que se haya producido conducta ilegal alguna, y aseguran en su defensa que los 14.000 archivos que le fueron sustraídos a Waymo no se incluyeron como parte de su tecnología de coches autónomos, informan en IBTimes.

Además, han señalado que la tecnología LIDAR, que es un aspecto esencial en sus prototipos, no tiene nada que ver con la utlizada por Waymo, y por tanto no se trata de una copia.

En Google afirman que dos antiguos trabajadores de Waymo, que abandonaron la compañía para poner en marcha Otto, una startup de vehículos autónomos que apenas duró tres meses, son los culpables del robo de esos documentos confidenciales.

En ese sentido, aseguran que esos dos ejecutivos aprovecharon información confidencial de su etapa en Waymo para ayudar a al desarrollo de la tecnología de coches sin conductor de Uber, que compró Otto en agosto de 2016.