IBM y Oracle firman la paz por el caso de la ejecutiva fugada

IBM y Oracle han llegado a un acuerdo amistoso para no tirarse los trastos a la cabeza en los juzgados. Cada compañía ha decidido abandonar su demanda cruzada y han retirado los cargos que imputaban a su competidora.
Todo el desaguisado legal se inició en el mes de junio cuando una ejecutiva de IBM, Joanne Olsen, dejó el Gigante Azul para fichar por Oracle. IBM acudió a los juzgados amparándose en una cláusula de confidencialidad que obligaba a la trabajadora a tener que esperar un año para poder ser contratada por una firma rival, una medida de la casa para limitar la “fuga de cerebros”.
En contestación, Oracle inició una contrademanda contra IBM en el Tribunal de Distrito de San Francisco, en Estados Unidos.
La batalla legal era una muestra tangible de la creciente competencia entre ambas compañías en el mercado de los servidores tras la adquisición de Sun por parte de Oracle, según se hace eco ITProPortal.
Por el momento, se desconocen los términos del acuerdo alcanzado por IBM y Oracle y sí han supuesto algún desembolso económico.