IBM alcanza el petaflop con Roadrunner

El hecho de que el cerebro del supercomputador de IBM, construido por el Departamento de Energía estadounidense, esté formado por un chip para consolas y un microprocesador de consumo es bastante inquietante, un ejemplo de cómo el hardware para masas está avanzando dentro de la informática de alto rendimiento (HPC) y de cómo los procesadores especializados sólo en HPC ya no son rentables. Parece que la tendencia de la economía obliga a diseñar procesadores para el mercado de consumo masivo primero y después adaptarlos para ser utilizados en la informática HPC.

Los ordenadores Blue Gene/L y Blue Gene/P de IBM ocupan el segundo y el tercer puesto de la lista con procesadores PowerPC que también se utilizan en equipos de networking.

Los procesadores x86 (tanto de doble como de cuádruple núcleo) están en un gran número de supercomputadores de la lista. Los diseños de 64 bit de Intel han desbancado bastante a los de AMD y los Intel x86 están en más de un 71 por ciento de las máquinas de la lista. Los de AMD han bajado y sólo son utilizados por un 11 por ciento de supercomputadores, por detrás incluso de la arquitectura Power de IBM.

En la lista se tiene en cuenta por primera vez las mediciones de eficiencia energética. El Cell de IBM encabeza este apartado, alcanzando con los blades del procesador Cell QS22 los 488 Mflops por vatio. Por comparar, los blades basados en el cuádruple Xeon de Intel “Harpertown” no llegaron ni a la mitad de esta eficiencia.

vINQulos
Ars Technica