Así será el impacto de los parches para Spectre y Meltdown en sistemas con Intel Core de 6ª, 7ª y 8º generación

Intel continúa ofreciendo detalles sobre las consecuencias que tendrán las medidas de seguridad desarrolladas en el rendimiento de los equipos.

Intel ha vuelto a ofrecer nuevos datos sobre lo que cabe esperar de las soluciones para las vulnerabilidades Spectre y Meltdown a nivel de impacto en el rendimiento de los sistemas afectados.

Ya se sabía que la combinación de Intel Core de 8ª generación, Kaby Lake y Coffee Lake, con almacenamiento de estado sólido verá un impacto máximo del 6 %. Pero el vicepresidente ejecutivo y director general del Grupo de Centros de Datos de Intel Corporation, Navin Shenoy, ha ahondado en el asunto aportando más detalles.

Con fecha de 10 enero, las pruebas de rendimiento en plataformas de 6ª, 7ª y 8º generación de Intel Core con Windows 10, han devuelto diferentes resultados.

Shenoy empieza valorando como “reducido” el impacto en la 8ª generación. “En diversas cargas de trabajo, incluyendo productividad ofimática y creación de contenido”, dice, “el impacto esperado es inferior al 6 %. En ciertos casos”, concede, “es posible que algunos usuarios observen un impacto ligeramente superior. Por ejemplo, aquellos usuarios que empleen aplicaciones web con operaciones complejas de JavaScript pueden llegar a experimentar un impacto más elevado (hasta el 10 %, según nuestras mediciones iniciales)”.

“Las cargas de trabajo con alto contenido de gráficos, como los juegos, o con requisitos informáticos elevados, como el análisis financiero, sufrirán un impacto mínimo”, sigue Shenoy.

Para la 7ª generación de plataformas móviles Kaby Lake-H, los resultados son “similares”, con un impacto de “aproximadamente un 7 % según el estándar SYSMark2014SE”.

Mientras, la 6ª generación Skylake-S sufrirá un descenso en el rendimiento “ligeramente más elevado, pero generalmente en línea con los resultados de las plataformas de 7ª y 8ª generación”, según Navin Shenoy, de “aproximadamente un 8 %”.

Intel habría medido asimismo el rendimiento en todas estas plataformas pero emparejándolas con Windows 7. Y “el impacto observado es reducido”, asegura Shenoy, “aproximadamente un 6 %”. Y “en el caso de los sistemas con HDD, el impacto observado es aún menor”.

La intención de Intel es aportar más información la semana que viene sobre las plataformas móviles y de sobremesa de sus últimos cinco años. También compartirá detalles sobre las plataformas de servidores. Y advierte: “nuestros resultados pueden variar a medida que llevemos a cabo pruebas adicionales”.