Resultados agridulces de Intel para el último trimestre del año

A pesar de la guerra de precios con su rival Advanced Micro Devices
(AMD), y el coste que ha tenido que pagar por
su reestructuración, Intel anunció ayer
martes unas ventas récord de 70 millones de microprocesadores durante el cuarto
trimestre de 2006. Igualmente positivas han sido las ventas de memorias Flash.

Sin embargo, estos datos no deben ser motivo de alegría total para la
compañía, ya que, pese a que sus beneficios netos y su cifra de negocio han
crecido respecto al tercer trimestre de 2006, registran una importante caída en
relación con el mismo periodo del año anterior.

Así, según los datos proporcionados por la propia empresa, el beneficio neto
del último trimestre fue de 1.500 millones de euros, que aunque supone un
aumento del 15% respecto a los datos del tercer trimestre de 2006, representa un
retroceso del 39% en relación con los mismos meses de 2005.

Por lo que se refiere al beneficio de sus valores, se alcanzaron los 26
céntimos por acción, un 35% menos de lo que se obtenía por ellas un año atrás.

En cuanto a su cifra de negocio, fue de 9.690 millones de dólares, lo que
también refleja un retroceso del 5% respecto a los datos de 2005.

Con estos resultados, Intel supera las expectativas de los analistas, que
habían previsto unos beneficios de 9.440 millones de dólares para el grupo. Sin
embargo, aunque es cierto que va levantando cabeza, lo hace muy despacio.

Hasta tal punto que la compañía ha querido ser prudente con las estimaciones
para el primer trimestre de este año y ha apuntado unos resultados de entre
8.700 y 9.300 millones de dólares, unas cifras algo inferiores de lo que esperan
los analistas.

El anuncio de los resultados de Intel ha llegado cuando la bolsa ya había
cerrado. En el mercado after-hours, la cotización de Intel ha caído 20
céntimos, hasta los 22,10 dólares. Antes del cierre, las acciones de la empresa
habían subido 17 céntimos, terminando la jornada en 22,30 dólares.