Intel destaca la obtención de “resultados sólidos en un entorno económico adverso”

A pesar de que la comparativa con el Q3 de 2014 refleja caídas en los beneficios netos y las ganancias por acción, Intel sí ha mejorado sus números desde el punto de vista secuencial.

Con un nuevo trimestre concluido, Intel ha puesto los números sobre la mesa para anunciar cómo le ha ido a nivel financiero.

Según su consejero delegado, Brian Krzanich, “hemos ejecutado bien nuestras operaciones en el tercer trimestre y hemos ofrecido unos resultados sólidos en un entorno económico adverso”.

En concreto, la compañía de Santa Clara ha ingresado 14.500 millones de dólares durante su Q3 frente a los 14.600 millones obtenidos durante el mismo periodo del año anterior, lo que en la práctica se trata casi de una evolución sin cambios.

La mayoría de esos millones procede del Client Computing Group, que por sí solo aporta 8.500 millones de dólares. Otros 4.100 millones proceden del Data Center Group. Mientras que el resto lo aportan el Client Computing Group y el Internet of Things Group.

Los beneficios netos del tercer trimestre han sido de 3.100 millones de dólares y las ganancias por acción se han quedado en 64 centavos, lo que implica sendas caídas interanuales del 6% y del 3%, respectivamente.

Pero la comparativa cambia cuando se realiza tomando como referencia al Q2 de este mismo 2015, cuando se ingresaron 13.200 millones de dólares (un 10% menos que ahora), con beneficios netos de 2.700 millones (un 15% menos que ahora) y ganancias por acción de 55 centavos (un 16% menos que ahora).

“Este trimestre ha sido una demostración de la capacidad de innovación de Intel y de cómo ponemos esa innovación en acción”, asegura Brian Krzanich.

“Nuestros clientes se han mostrado entusiasmados con nuestra nueva 6ª generación de procesadores Intel Core”, dice el directivo, “y hemos presentado la tecnología 3D XPoint, la única categoría de memoria totalmente nueva en hacer su aparición en las últimas dos décadas”.

En cuanto a las previsiones, para el siguiente cuarto Intel estima que ingresará alrededor de 14.800 millones de dólares, una cifra que podría acabar variando en torno a los 500 millones.