Intel dice que la nube no es imprescindible para el IoT y anuncia el nuevo Atom E3900

En un mundo dominado por el IoT, los dispositivos, cada vez más inteligentes, y el mismo borde de la red, serán capaces de procesar datos en tiempo real, dice Intel.

BARCELONA. El cloud como habilitador del Internet de las Cosas (IoT) es una falacia, decía hoy Jonathan Ballon, responsable de IoT en Intel, durante su ponencia en el IOTSWC, o IoT Solution World Congress, que esta semana se celebra en Barcelona y que ha titulado “IoT, from hype to reality”.

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Jonathan Ballon, Vicepresidente de Internet of Things en Intel.

Antes de asegurar que la nube no es imprescindible para el IoT quiso Ballon hacer un repaso por lo que ha sucedido en este mercado en los últimos años, apuntando un mensaje de Eric Smith, el que fuera presidente de Google: “The network is the computer”, como si de una semilla se tratara, como se fue demostrando a lo largo del dicurso.

Durante el último año se ha ido haciendo camino hacia lo que Ballon definió como las Software Defined Autonomous Machines. También se ha vivido la madurez del mercado, con acuerdos y adquisiciones que buscan profundizar en las capacidades del IoT.

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La nube no es imprescindible porque, entre otras cosas, no es la única manera de procesar la enorme cantidad de datos recolectados de la red de sensores y de dispositivos inteligentes, asegura el directivo, añadiendo que la analítica y tratamiento de los datos puede producirse en el mismo borde de las redes del IoT tanto como en los dispositivos inteligentes o en las llamadas Fog Networks, una arquitectura de red que utiliza uno o más clientes o dispositivos para trasladar gran cantidad de almacenamiento, comunicaciones e incluso gestión; una arquitectura que, en la práctica, permitiría prescindir de un centro de datos o un cloud central.

No es cierto que todo el valor del IoT esté en la nube, volvía a decir Ballon. Las máquinas son inteligentes, y más que lo van a ser, y serán capaces de procesar datos en tiempo real. Un ejemplo son los coches, convertidos en “centros de datos móviles con cientos de millones de líneas de código”, quizá más de las que tiene un sistema operativo.

No se puede esperar que todas las cargas de trabajo se ejecuten en la nube, “algunas cosas ocurrirán en el dispositivo, otras en el borde de la red, en un contexto de fog computing, y algunas más en el cloud”, aseguraba Jonathan Ballon. ¿De qué dependerá? Del caso de uso, del coste de mover las cargas de trabajo, del tiempo, de los algoritmos… “pero necesitamos empezar a pensar en las cosas en términos de una arquitectura de principio a fin, no en términos de una u otra”.

Intel Atom E3900

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También ha hablado Ballon del papel de la 5G en el mundo del IoT. Y es un papel protagonista, porque facilita el llamado IoT Industrial y acelera las Smart Cities. ¿Dónde radica su importancia? En el hecho de que, por primera vez, decía el máximo responsable de Internet de las Cosas de Intel, se utilizarán un conjunto de estándares comunes para transmitirlo todo, desde los pocos datos de un termostato a las grandes cantidades que un automóvil tiene que enviar, y encima en tiempo real, y eso con un estándar común, independientemente de la distancia y de la velocidad.

Y lo siguiente que hacía Jonathan Ballon era anunciar el Intel Atom E3900, un SOC (system-on-a-chip) diseñado para el internet de las Cosas, en configuraciones de dos o cuatro núcleos y el motor gráfico de novena generación de la compañía.

El nuevo chip incorpora la Time Coordinated Computing Technology de Intel, capaz de coordinar y sincronizar periféricos y redes de dispositivos conectados, y según el fabricante de procesadores está diseñado para ofrecer una plataforma de hardware sobre la que las empresas podrán diseñar sistemas IoT potentes, como sistemas de asistencia en la conducción en los coches conectados o cámaras inteligentes para las Smart cities.