iPad Mini vs Nuevo iPad: ¿Qué tableta prefieren los usuarios?

El éxito de la versión reducida de la tableta de Cupertino está frenando las ventas de los modelos más grandes y los beneficios de la propia compañía de la manzana mordida.

Contradiciendo los designios de Steve Jobs, Apple lanzaba hace unas semanas el iPad Mini, una versión reducida de su famosa tableta que ya se puede adquirir en medio mundo (España incluida) desde 329 euros. Esto es, la versión Wi-Fi de 16 GB.

A cambio ofrece una pantalla LCD de 7,9 pulgadas de tamaño y 1.024 x 768 píxeles de resolución, chip A5X, 10 horas de autonomía, 7,2 milímetros de grosor y 272 gramos de peso. Está equipada con idéntico conector Lightning que el que viene integrado en el iPhone 5, cuenta con FaceTime HD, cámara iSight de 5 megapíxeles, conectividad LTE y un Internet inalámbrico más veloz que en generaciones anteriores.

Y parece que todas estas características están convenciendo a los usuarios… y mucho.

Según calcula la consultora Citi e informa la publicación Business Insider, las ventas del iPad Mini están fulminando las del iPad clásico y han obligado a la firma de la manzana mordida a revisar al alza los pedidos de su dispositivo en miniatura. No sólo eso, también han provocado la ralentización de las distribuciones del Nuevo iPad.

Si para el periodo navideño se habían encargado 10 millones de iPad clásicos a la cadena de suministro y otros 10 millones de iPad Mini, para el primer cuarto de 2013 los pedidos se han trastocado: disminuyendo hasta los 5-7 millones de unidades en el caso del primer modelo y aumentando hasta los 12-14 millones en el segundo caso.

Esto es así porque por cada iPad grande que vende Apple se consiguen colocar dos iPad Mini.

¿La consecuencia más inmediata? Los analistas temen que el año que viene se contraerán las ganancias de la firma de Cupertino. Y es que los de Tim Cook hace menos dinero con la venta de los baratos iPad Mini que con la de su tablet PC tradicional, mucho más beneficioso en términos económicos.