La Jornada Cultura en Red se estanca en el conflicto creadores vs. internet

La búsqueda de un marco jurídico que castigue a la piratería con ánimo de lucro y la necesidad de nuevos modelos, protagonistas.

La Jornada Cultura en Red que organizan hoy el Grupo Planeta, Bertelsmann y NBCUniversal no escapa, como era de prever, al manido tema de la piratería.

El conflicto entre creadores y los nuevos modelos de distribución digitales es más que evidente, es por todos los ponentes compartida la necesidad de buscar alternativas equilibradas que satisfagan a los autores, las industrias de contenidos y los usuarios.

En la mesa redonda sobre Propiedad intelectual y desarrollo tecnológico: garantías para una convergencia sostenible, también dos visiones claramente contrapuestas: la de las asociaciones de creadores y empresas de gestión de contenidos vs. internet.

Los primeros piden la creación de un marco jurídico que castigue a quienes se lucran con la distribución de contenidos protegidos. David Ortega, representante de la OCU, va más allá y propone que una vez adquirido un bien digital el usuario “pueda acceder a él desde otros dispositivos y hacer copias“.

Dejar la idea del “todo gratis” y el impulso de contenidos más atractivos y competitivos son las fórmulas que han planteado desde la Asociación desde la Organización de Consumidores y Usuarios.

“Me toca defender la visión de los malos”, ha dicho Borja Adsuara, director general de Red.es, en su intervención que ha iniciado invitando a no hablar de piratería y a plantear la cuestión “en positivo”.

“Internet es bueno”, ha defendido, para invitar inmediatamente después a reflexionar sobre los detractores de la imprenta en sus inicios.

El debate para Adsuara no tiene que ver con los contenidos sino con la economía digital de los contenidos y su potencial de motor de crecimiento. No es tan simple como digitalizar los contenidos. Se trata de desarrollar todos los procesos de negocio pensando en digital.

Adsuara, ha pedido una alianza estratégica entre los titulares de derechos y los “dueños de las redes” y la “liberalización de la gestión de derechos de propiedad intelectual”.

Para Francisco Ruiz Antón, de Google, “cultura y tecnología están llamados a entenderse”. Se ha sumado a la opinión de la necesidad de proteger los derechos de propiedad intelectual, pero ha puesto la puntilla.

“Reconocemos el daño, pero se ha creado un mito desbordado de deterioro digital que ha eclipsado el buen uso de las tecnologías”, ha dicho. Su visión es que Internet y las industrias creativas deben ir de lamano en la denominada revolución digital.

“Nunca se ha consumido tanta cultura, ni ha habido tanta demanda ni oferta”, ha defendido.