La receta para el éxito del Kindle Fire

“Veni, vidi, vici”. Lo hizo hace cuatro años el lector de libros electrónicos de Amazon y se espera que Jeff Bezos repita proeza con la primera tableta de la compañía de comercio electrónico. Se ha convertido ya en el producto más solicitado de Amazon.com y se habla de entre 3 y 5 millones de copias para lo que queda de 2011. Sobre todo teniendo en cuenta que el lanzamiento de Kindle Fire llega a tiempo para la temporada de compras navideñas.

A simple vista, el dispositivo no cuenta con la sofisticación de sus competidores. Sin conexión 3G, sólo funciona con Wi-Fi, no incluye cámara ni micrófono y su pantalla se queda 2,7 pulgadas por debajo de la del iPad. ¿Qué es entonces lo que tiene Fire que ha enamorado a usuarios y analistas a los pocos días de su presentación?

Un precio de partida de 199 dólares o, lo que es lo mismo, es 300 dólares más barata que la decana de las tabletas, que la BlackBerry PlayBook o que la extinta HP TouchPad cuando salió al mercado.

Asimismo, pone en serios aprietos al resto de la comunidad Android, donde Samsung Galaxy Tab 10.1, Motorola Xoom, Sony S, HTC Flyer y Acer Iconia Tab A500 se rigen por el mismo coste base que el iPad. Mientras que las más competitivas serían Dell Streak 7 y Archos 80 G9, ambas a la venta por 299 dólares (todos ellos precios en los Estados Unidos). Fuera del sector empresarial Fire es mucho más que un iPad-killer.

Y es que Amazon ha dado un golpe sobre la mesa, redefiniendo en nombre de los usuarios cuánto se debería pagar por una tableta decente y creando un nuevo mercado. La mayoría de los consumidores utilizan estos dispositivos para surfear en la web y enviar correos, dos tareas que el nuevo Kindle agiliza con su navegador móvil Silk. O para leer e-books, terreno en el que la empresa de Bezos está curtida. O ver películas y jugar a Angry Birds, algo que será más cómodo gracias a sus 413 gramos de peso.

No sólo precio: contenido digital, cloud computing y una marca con gancho

Precisamente otra de las claves para el éxito de Kindle Fire es su ingente cantidad de contenidos digitales, reunidos en un único producto: desde su colección de 1 millón de libros, periódicos y revistas hasta los 18 millones de canciones de Cloud Player y los 100.000 programas de Instant Video, pasando por las 16.000 aplicaciones Android de su propia Appstore. Mientras, el servicio Amazon Prime, por el que los suscriptores pagan una tarifa de 79 dólares anuales, además de eliminar gastos de envío en compras físicas, da acceso a miles de series y películas.

Amazon se puede permitir el lujo de perder sobre el papel 50 dólares por cada tableta vendida y recuperarlos (con beneficios) a través de las suscripciones a sus servicios y del tráfico generado en su página web. En este sentido, Fire ayudará al gigante de Seattle a vender más contenido.

La batalla se traslada también a la nube, con Amazon como contendiente aventajado sobre Apple, Google o Microsoft. Para potenciar la adquisición de bienes digitales y compensar los 8 GB de almacenamiento físico de su tablet PC, se deja a los usuarios almacenar información en Amazon EC2 (Elastic Computing Cloud) de forma gratuita. Y no habrá necesidad de sincronizarlo con un ordenador a través de cable USB, como ocurre con el iPad, sino que se realizará de forma inalámbrica.

Como los servidores de la firma tecnológica hospedan buena parte de los sitios web más populares del momento, y con ayuda del algoritmo de prioridades que sus ingenieros han ideado para Silk, la velocidad de datos aumenta y se podrá predecir el comportamiento de los cibernautas. De hecho, el nuevo navegador es uno de los platos fuertes de Kindle Fire en comparación, por ejemplo, con el Safari de Apple que utiliza un diseño tradicional para conectarse a Internet.

Dos nuevos minipuntos para Amazon: se reinventa la experiencia de usuario con los servicios web y la otrora tienda de libros pasa a competir también en el terreno del software.

Finalmente, la reputación de la compañía precede a sus productos. Disfruta de una cartera de clientes que se cuenta por millones y se extiende por los cinco continentes. Tiene el número de sus tarjetas de crédito y conoce sus nombres. Una ventaja que por sí sola es suficiente para amenazar el 80% de cuota de mercado que Apple controla actualmente… a menos que la firma de la manzana tenga guardada alguna sorpresa para su evento del próximo martes.