La ¿utopía? de los 7.000 millones de internautas

Mark Zuckerberg volverá a ser uno de los protagonistas del Mobile World Congress, donde hablará de su proyecto para llevar Internet a todo el mundo.

El refrán dice que no hay dos sin tres. Y en el caso de las intervenciones de Mark Zuckerberg en el Mobile World Congress de Barcelona este dicho se va a cumplir. El CEO de Facebook volverá a nuestro país toda vez que ya se ha reincorporado a la rutina de dirigir la red social que él mismo fundó tras agotar su baja por paternidad. Y lo hará expresamente para participar en este gran evento de la movilidad que está a puntito de cumplir una edición más. Será la próxima semana, entre el lunes 22 y el jueves 25 de febrero. Para la mismísima jornada inaugural está prevista la entrada en escena de la que a día de hoy es una de las figuras más destacadas del panorama tecnológico, con una conferencia de menos de una hora de duración que dará comienzo a las seis de la tarde.

Mark Zuckerberg acudió por primera vez a esta cita en 2014, cuando la asociación que organiza el Mobile World Congress logró culminar un trabajo de cuatro años. Tanto fue lo que costó a la GSM Association traerlo como conferenciante. La expectación de su visita fue máxima y él la aprovechó para profundizar en el proyecto Internet.org y la construcción de un Internet global y gratuito capaz de ofrecer ciertos servicios básicos a los usuarios, como la mensajería, las aplicaciones sociales y las información del tiempo. Y como Facebook justo acababa de comprar el servicio de comunicación instantánea WhatsApp, también habló de eso. El año pasado, Zuckerberg repitió. De nuevo sacó a relucir su deseo de conectar el planeta. Lo hizo acompañado de representantes de las operadoras Telenor, Millicon y Airtel África, como una forma de defender el potencial de su idea para incrementar el consumo de datos y la rentabilidad del negocio móvil. Por aquel entonces, la unión entre socios ya estaba dando frutos en algunos países.

En tan sólo unos días, Marzk Zuckerberg volverá a acaparar miradas en el Auditorio 1 de la feria. Según ha explicado a NetMediaEurope el CMO de la GSM Association, Michael O’Hara, el impulsor de Internet.org tiene previsto retomar el tema del acceso a Internet desde todas las partes, incluidos los mercados emergentes. Una novedad este año será que, por primera vez en la historia del congreso, las keynotes de los distintos participantes se irán retransmitiendo en directo. Así que aquellas personas que no consigan acceder al auditorio o que no quieran contribuir a las largas colas, serán capaces de seguir su conferencia por streaming a través de un canal especial habilitado en la página web mobileworldlive.com o con la aplicación My MWC Event.

Se espera que en esta ocasión Zuckerberg vaya un paso más allá y explique aspectos más técnicos de Internet.org. Debería tocar la parte tecnológica que permitirá hacer viable su visión, llevando Internet a los confines del mundo. Este proyecto comenzó su andadura en el verano de 2013, apoyado en su orígenes por otras compañías aparte de Facebook, como Ericsson, MediaTek, Nokia, Opera, Qualcomm y Samsung. Conscientes de que más de la mitad de la población mundial, de alrededor de 7.000 millones de personas, aún no estaba online, las aliadas en torno a Internet.org decidieron abaratar el acceso con dispositivos de precios razonables, servicios menos voraces e infraestructuras hasta ese momento inéditas. Mark Zuckerberg y los suyos han decidido trazar diferencias entre unos puntos geográficas y otros, buscando diversas soluciones para su problema de conexión. De ahí que Internet.org esté probando con varias opciones: satélites, láseres y aviones no tripulados que vuelan a gran altitud y alimentados por energía solar. Estos aviones reciben el nombre de Aquila.

Tropiezo de Internet.org en la India

El Connectivity Lab de Internet.org es el encargado de explorar fórmulas que materialicen la conexión asequible en cualquier lugar, por remoto que éste sea. Para ello cuenta en plantilla con ingenieros aeroespaciales que están investigando sobre cómo mejorar la precisión de las soluciones que deben entregar Internet a pesar de la distancia, así como la forma de aprovechar rayos infrarrojos para enviar datos a la velocidad de la fibra óptica o material más ligero que el aluminio y más fuerte que el acero. Por su parte, el Innovation Lab se encarga de las aplicaciones al ofrecer a los desarrolladores un entorno de pruebas que imita las condiciones reales y cambiantes de la red, según la zona del planeta. Hay iniciativas paralelas como The Internet.org Innovation Challenge o Express Wi-Fi, que se implica con empresarios locales. Y la plataforma Free Basics es la que ofrece acceso móvil a webs de utilidad, de noticias, empleo, salud o educación, sin cobrar por ello.

A día de hoy, Free Basics está disponible en 37 países en colaboración con otros casi tantos operadores de telefonía. Son 20 países de África, desde Angola a Zambia. Más 11 de la región Asia-Pacífico, como Irak, Mongolia o Filipinas. Y 6 de Latinoamérica, entre los que se encuentra México. Desde Internet.org calculan que su proyecto ya ha convertido en internautas a 19 millones de personas que de otra manera nunca habrían conseguido una conexión a Internet. Aunque no todo ha sido un camino de rosas. A principios de este mes, el organismo regulador de las telecomunicaciones de la India se pronunció en contra de Free Basics, entorpeciendo su expansión en el país, al entender que vulnera los principios de neutralidad. Aunque Free Basics se abre a distintas propuestas, no acepta el consumo de demasiados datos, como con el vídeo o VoIP, y esto se ha entendido como discriminación al priorizar unos contenidos sobre otros. Facebook estaría dando acceso a Internet, pero no a todo lo que existe en Internet. El de la India no habría sido el primer obstáculo.

Mark Zuckerberg ha asegurado que no renunciará a mejorar la situación india, porque ahí hay una gran base de usuarios potenciales. Se calcula que 1.000 millones de los habitantes de dicho país no tienen conexión, lo que supone justo una cuarta parte de los 4.000 millones de personas que todavía no se relacionan con esta tecnología en el mundo. Meses antes de verse forzados a reconsiderar sus esfuerzos en una parte clave de Asia, el promotor de Internet.org ya había elaborado un alegato en favor de Free Basic a través de un artículo que salió publicado en The Times of India. Y también se ha defendido que el 86 % de consultados en la zona apoyaba el servicio. Ofrecerles Internet implica mejorar su calidad de vida, o al menos concederles las mismas oportunidades que a los ya conectados. El propio Zuckerberg calcula que con un Internet más global se podrían crean 140 millones de empleos y sacar a 160 millones de personas de la pobreza.

Desde crear trabajo hasta salvar vidas o mejorar los niveles de educación, pasando por equilibrar el poder en la red entre países desarrollados y en desarrollo, las ventajas de expandir Internet son variadas. Aunque ésta no es una cuestión de solidaridad pura y dura. Internet también es un negocio. Las empresas que ofrecen servicios online necesitan conseguir cada vez más usuarios y eso sólo es posible otorgando conexión a quienes no la tienen. Si no hay más conexión a Internet, el crecimiento de adeptos se estanca. Pero, ¿es posible? ¿es viable llevar Internet a los países emergentes? Se estima que más del 85 % de la población mundial se localiza en zonas con cobertura celular, por lo que parte de la infraestructura es aprovechable. El resto depende del avance investigador en despliegues rentables más allá de los cable de fibra, los repetidores de microondas y las antenas de telefonía celular, el dinero disponible para invertir, la asociación entre empresas, la implicación política, las leyes sobre Internet o en temas como los drones y el tiempo que se quiera emplear, que no es poco.