La nueva era de Michael Dell

Tras un turbulento año 2007, los primeros resultados de Dell correspondientes al primer trimestre de su año fiscal 2009 marcan un comienzo totalmente distinto (ver noticia).
En este período, la compañía ha obtenido unos ingresos de 16.000 millones de dólares, un 9 por ciento más frente al primer trimestre del ejercicio anterior, con un incremento del 12 por ciento en ganancias por acción.
El propio CEO de la firma, Michael Dell, indicaba en una reunión con analistas su satisfacción por “comenzar a ver resultados positivos”, destacando además el buen comportamiento en todos los segmentos de mercado y regiones.
De hecho y según Dell -quien volvió a tomar las riendas de la compañía en enero de 2007-, mientras la industria de PC ha crecido un 14 por ciento en unidades comercializadas, la compañía ha incrementado sus ventas un 22 por ciento hasta los 4.900 millones de dólares.
No obstante, y como afirmaba el responsable financiero de Dell, Donald Carty, todavía queda mucho por hacer. Y es que esos 22 puntos corresponden al incremento en portátiles, mientras la comercialización de equipos sobremesa tan solo ha crecido un 2 por ciento, cayendo un 5 por ciento en términos de ingresos (4.700 millones de dólares).

Ajustes

Estos resultados son los primeros después de que hace casi un año se anunciara una reestructuración diseñada para ajustar los costes internos (ahorrando 3.000 millones de dólares para 2011) y relanzar la marca en el ámbito internacional. La reestructuración afectó a 7.000 empleados a escala global durante 2007, plantilla que durante el último trimestre se ha reducido en otros 3.700 profesionales.

A estos despidos hay que restar la contratación de 2.700 empleados procedentes de recientes adquisiciones, por lo que la reducción total de plantilla iniciada en 2007 afecta aproximadamente al 5 por ciento del total de trabajadores.

Durante una reunión con analistas, Michael Dell también ha admitido que la compañía cometió un error al omitir algunas tendencias de mercado durante 2006, como el mayor foco en ‘retail’ y el mercado de consumo.
Precisamente, estas dos actividades -la venta dirigida a consumo y al segmento ‘retail‘-, han sido reforzadas, dando ahora sus primeros frutos gracias a la apertura del modelo de venta directa. Desde entonces, el fabricante ha conseguido comercializar sus PC, impresoras y portátiles en 13.000 cadenas de ‘retail’ a escala global, cifra que sigue aumentando.

 
Empuje internacional

Junto a la mayor presencia en el segmento de venta indirecta y la reestructuración, los resultados positivos se deben principalmente al buen comportamiento en el mercado internacional.
Por primera vez en la historia de la firma, sus ventas fuera de Estados Unidos representan el 50 por ciento del total, registrando un incremento especialmente importante en lo que se conoce como BRIC (Brasil, Rusia, India, China).
El crecimiento medio en esta zona supera el 50 por ciento, y solamente en China la venta de equipos marca Dell ha aumentado un 140 por ciento comparado con el año anterior. Así, la compañía estima que en un plazo de cinco años dos terceras partes del total de sus ventas procederán del entorno internacional.

A pesar de este avance, HP sigue siendo el primer vendedor mundial de PC por número de unidades y Acer ha alcanzado una excelente posición en portátiles, segmento que Dell no ha prestado la suficiente atención hasta la fecha.

Otro de sus grandes rivales es Apple, marca que ha sabido sobrevivir gracias a su capacidad de adaptación con productos tan novedosos como el iPod o el nuevo iPhone.
 

 
Renovación de oferta

En este sentido, los analistas se preguntan si Dell podría entrar en el negocio de pequeños dispositivos. El CEO de la firma ha comentado que están invirtiendo en diseños más grandes que un teléfono móvil y más pequeños que un PC, por lo que el abanico de oportunidades se amplía bastante.
Con todo, Dell está incidiendo en una mayor renovación de su familia de portátiles, incluyendo nuevas fábricas de ‘notebooks’ en Polonia y el cierre de otras convencionales, como su fábrica de PC ubicada en Texas, que implica el despido de 900 trabajadores.
Tras presentar la nueva serie Latitude E, se lanzarán nuevos portátiles a lo largo del año, incluyendo uno ‘mini’ y otros más convencionales en la campaña de ‘vuelta al cole’. También se espera un nuevo desktop un 80 por ciento más pequeño y con un consumo energético un 71 por ciento menor.
Además de a una activa competencia, Dell debe enfrentase a la ralentización económica de Estados Unidos. Allí las ventas de PCs aumentaron tan solo un 3,5 por ciento en los primeros tres meses de 2008.
Con respecto al ámbito corporativo, la multinacional ha ampliado su apuesta por los servicios y ofertas especializadas, distanciándose de su visión como fabricante de equipos de bajo coste para reinventarse como compañía que compite directamente con IBM y HP.