La sangría de despidos continúa en la industria de los semiconductores

Malos resultados generalizados, retroceso en el mercado y despidos masivos: la industria de los semiconductores se resiente más que ninguna otra de la mala situación financiera y de un exceso, como apuntan algunos especialistas, de producción que lastra sus resultados y produce un overbooking en el mercado.
A la larga lista de empresas del sector en problemas, se suma Chartered Semiconductor, una de las principales productoras de chips y que, ante una pérdida anunciada de 114 millones de dólares en el Q4 de 2008, despedirá a 600 trabajadores, como publica AFP.
Unas cifras moderadas si se tiene en cuenta la caída en ingresos del 31% de TSMC o la mala situación de Qimonda. La preocupación por esta última compañía continúa acechando a los portugueses, cada vez más pesimistas ante la suerte de su mayor exportador.
La compañía ya ha reconocido, a través de su presidente, que se pueden producir despidos inmediatos en sus fábricas de Dresden y Vila do Conde, Porto, como recogen los medios portugueses.
Qimonda ya ha realizado recortes de personal en sus sedes de Malasia y Munich y ha iniciado el cierre su factoría de Richmond, Estados Unidos, lo que supone el despido de 1.500 personas, como recoge Jornal de Negócios. El cierre “era inevitable para mejorar la eficiencia productiva y para centrarse en la siguiente generación de chips”, como apunta un portavoz en declaraciones que recoge Reuters.
El cierre de la fábrica estadounidense más que tranquilizar reafirma los temores de los trabajadores de la compañía, que como apunta la prensa lusa siguen teniendo “miedo” a pesar de los contínuos mensajes tranquilizadores de la central.
“Si no se pueden encontrar inversionistas para financiar la continuación de las empresas de Qimonda, probablemente Qimonda AG será liquidada“, explicó a la agencia de noticias un miembro de la compañía.