Los CEO que lucharán contra viento y marea (y accionistas) en 2015

Caída de ingresos, presión mediática, judicial y financiera… a estos CEOs les viene un duro 2015.

Algunas empresas tecnológicas se enfrentan a un año decisivo para sus intereses y su supervivencia en el futuro inmediato.

Sus respectivos equipos directivos y en particular sus consejeros delegados deberán de hacer frente a las transformaciones que algunos ya han anunciado, gestionar los cambios y enfrentarse a las adversidades que conlleven, manteniendo la confianza de los inversores.

Travis Kalanick es un nombre indispensable en esta lista que recoge la prestigiosa Fortune. El CEO de Uber tiene muchos frentes abiertos en la actualidad. Primero fueron los poco ortodoxos métodos utilizados contra los medios de comunicación que criticaban a la empresa. Después, la acusación por violación a uno de los conductores del servicio en India y su posterior prohibición.

La aplicación también ha sido vetada en España (aunque Uber ya ha anunciado que se saltará la prohibición) y criticada en Sydney, donde se acusó a los conductores de subir las tarifas aprovechando la demanda generada por el secuestro de una cafetería.

No hay duda de que Uber goza de una excelente salud financiera. Su valoración ya alcanza los 40.000 millones de dólares y cuenta con el respaldo de inversores como Baidu, pero en 2015 Kalanick y su equipo –que incluye al cerebro de la campaña política de Obama- deberá luchar por reflotar su maltrecha reputación.

Michael Lynton es el máximo responsable de Sony Pictures. Puede que pocos ejecutivos se hayan enfrentado a mayores adversidades que él en el último mes. El ataque a los sistemas de la productora sacó a la luz información confidencial de empleados, estrellas de cine y correos electrónicos entre ejecutivos de la firma.

El propio Obama intervino al pedir que no se detuviera el estreno de The interview, film que originó el ataque de supuesto origen norcoreano. Lynton se enfrenta a un 2015 en el que deberá restablecer los sistemas de seguridad de la firma y reconstruir su imagen de marca.

Meg Whitman, CEO de HP, se enfrenta a la división de HP. La compañía estadounidense anunció que iba a dividir su negocio en dos en octubre de 2014 con la intención de agilizar procesos y atacar diferentes nichos de forma más eficiente.

La compleja operación, de la que se desconocen los detalles, afectará a todos los mercados en los que HP está presente. Entre los cabos sueltos por ejemplo, se desconoce cómo gestionará HP a los clientes que consumen sus servicios y que en breve se repartirán entre dos empresas.

Ginni Rometty, CEO de IBM se enfrenta a la presión de los inversores. El Gigante Azul reportó caídas del 4% en sus ingresos del último trimestre y un 10% en los beneficios. La ejecutiva ya ha empezado a trabajar para mantener la confianza de los inversores con el anuncio de sendos contratos de Cloud que se extenderán en los próximos años. En 2015 deberá mantener esta senda.

Por último, Marissa Mayer, CEO de Yahoo, se enfrenta a accionariado de la compañía que quiere ver más ingresos. La ex googler debe hacer frente a la caída de la publicidad digital tradicional e impulsar la móvil, integrar todo el talento que ha adquirido desde su llegada a Yahoo y gestionar las voces que piden la fusión entre Yahoo y AOL.