Microsoft se lo juega todo a la carta de Windows Phone

Los primeros smartphones con “Mango” llegarán este miércoles, mientras Microsoft planea abaratar su producción en un 50% y asfixia el ecosistema Android con sus acuerdos de licencia.

Hacerse un hueco en el mercado de los smartphones se ha vuelto una prioridad para Microsoft y, para conseguirlo, intentará reducir el coste de producción de sus dispositivos con Windows Phone en un 50%. ¿El secreto? El uso de chips Qualcomm.

Así lo ha anunciado el responsable de la plataforma, Andy Lees, que ha marcado como objetivo un precio por teléfono de “menos de 200 dólares” a partir del año que viene, tal y como recoge Bloomberg.

 Los desarrolladores podrán probar nuevas funcionalidades como un actualizado Live Tiles, Motion Sensor o Live Agents
“Mango” intentará enganchar a los consumidores con sus 500 nuevas funcionalidades

Y, para compensar la reducción de los márgenes de beneficio por esta drástica bajada de los precios, las cuentas de Microsoft ya apuntan a que se conseguirá un volumen de ventas sustancialmente mayor al actual.

El as en la manga de Microsoft para minar la cuota de mercado de Apple y Google es el lanzamiento de terminales con la actualización 7.5 de su sistema operativo, que cuenta con 500 nuevas funcionalidades entre las que destacan la multitarea, el soporte de capacidades 4G y la integración de aplicaciones empresariales como Office, OneNote, SharePoint, Office365 y Office WebApps.

Los primeros smartphones “Mango”
en llegar al mercado, según ha confirmado el propio Lees, serán los fabricados por Nokia que, a pesar de haber visto reducida su cuota en el terreno de los smartphones, sigue siendo el mayor vendedor mundial de teléfonos por volumen.

Modelos como “Sea Ray” harán acto de aparición este mismo miércoles en el evento Nokia World de Londres. Se espera que presenten un hardware totalmente diferente a lo que nos tiene acostumbrados la firma finlandesa, cámara de 8 megapíxeles y pantalla de unas 3,7 pulgadas.

Microsoft también ha firmado recientemente el desarrollo de teléfonos móviles con Samsung, como parte de su acuerdo de licencias, que le obligará a pagar unos 15 dólares por cada dispositivo Android que venda.

En este sentido, los de Redmond ya cobran derechos de propiedad intelectual a más del 50% de los fabricantes de diseños originales que trabajan con Google. El último en pactar con Microsoft ha sido el taiwanés Compal Electronics, uno de los principales ODM a nivel mundial junto con Wistron y Quanta.