Microsoft y el sistema educativo británico: ¿nuevas relaciones o nuevo engaño?

La “British Educational and Tecnology Agency” encargada del desarrollo informático y tecnológico en el sistema educativo británico, emitió duros informes contra Microsoft “no encontrando argumento convincente alguno para el despliegue de Office 2007 en las aulas” pidiendo a profesores, padres y alumnos “que fueran conscientes de la existencia de alternativas libres a los productos de Microsoft”. Toda una declaración de intenciones, sumadas a una denuncia formal a la “Office of Fair Trading” por prácticas desleales.

Ahora Microsoft, consciente de lo que está en juego, ha iniciado un programa piloto que se extenderá durante seis meses con rebajas en el precio de la suite ofimática y un nuevo modelo de concesión de licencias a disposición de todas las escuelas.

Michel Van der Bel, vicepresidente del sector público de Microsoft en Europa, indicó en una declaración que “entendemos que la cuestión de la interoperabilidad es uno de los factores clave que sustentaron la denuncia de Becta ante la ODF, por lo que seguiremos colaborando con la agencia para la implementación del formato de documentos libre ODF en Office 2007 que satisfaga al sector educativo”.

Los responsables de BECTA han respondido que estaban “complacidos” con el nuevo programa de licencias que suponía “un claro compromiso con la interoperatibilidad”. Aún así, no han retirado la demanda interpuesta ante la oficina europea, ni van a variar su informe recomendando no actualizar a Vista ni a Office, por lo menos hasta la aplicación efectiva del soporte a ODF, según indicaron en un comunicado.

No todos están tan satisfechos. Mark Taylor, fundador del Open Source Consortium, indicó que “el sistema educativo debería detenerse y pensar antes de ser engañado por el nuevo sistema de licencias de Microsoft”. Para Taylor, Microsoft se ha visto obligado a esta posición y se pregunta si las supuestas mejores prácticas de la compañía que se han producido “arrastrándose, pateando y gritando” hubieran sucedido sin la postura de la comisaria europea de competencia y la Unión europea, sin la controversia en la aprobación del OOXML por la ISO o sin la denuncia de la BECTA.

vINQulos
The Register