Nada de vacunas gratis a los países pobres

“Para que la producción de fármacos sea sostenible, hay que crear incentivos financieros”, dice el consejero delegado de la farmacéutica suiza al Financial Times, desoyendo la petición de la OMS y rompiendo la unanimidad entre los grupos que preparan la vacuna contra el virus H1N1, que como el laboratorio británico GlaxoSmithKline, ha confirmado la cesión de 50 millones de dosis.

Los ejecutivos de Novartis podrían estudiar reducción de costes, pero no están dispuestos a servirla gratis. Para la farmacéutica, los países ricos que tienen programas de ayuda son los que tienen que financiar el coste de la producción de vacunas.

El diario británico considera la postura de Novartis un desaire hacia la OMS, que declaró la enfermedad provocada por el virus H1N1 como la primera pandemia por gripe del siglo XXI y pidió solidaridad a la industria farmacéutica con los países más pobres del planeta.