¿Pero Samsung no era un fabricante móvil?

La presentación del Galaxy S4 se centró principalmente en el software. Las menciones al hardware apenas ocuparon el 10% del tiempo del evento.

La presentación del Galaxy S4 ha puesto de manifiesto que Samsung presta más atención al software que al hardware.

Basta con echar un vistazo a las características externas del terminal para observar que no dista mucho de la anterior versión. Es más delgado y la pantalla un poco más grande; ha pasado de las 4,8 pulgadas a las 5 pulgadas.

Samsung destinó en 2012 un total de 32.600 millones de euros a I+D, un 12% más que en 2011. Y los frutos de esta inversión se han reconocido en las herramientas que incluirá el nuevo smartphone.

Desde la posibilidad de hacer scroll con el simple movimiento de los ojos, parar un video en reproducción cuando se mire hacia otro lado y hasta la interacción con la pantalla sin tocarla directamente.

Pueden utilizarse las dos cámaras (de 13 megapíxeles la trasera, 2 megapíxeles la frontal) de forma simultánea y editarlas posteriormente. Permite además hacer una llamada mientras se utiliza la cámara para fotografiar o grabar.

La innovación llevada al extremo

Se desconoce si los fondos para el despliegue escénico de ayer han salido o no de la cartera de I+D. Lo cierto es que el evento en Nueva York fue cuanto menos, original.

Al más puro estilo hollywoodense Samsung mostró sus novedades a través de decenas de actores. Estos escenificaban los usos de las tecnologías presentadas, todo ello aliñado con música en directo, como ya hiciera en la presentación del Galaxy S3 en Londres.

Samsung ha mostrado todas sus cartas para competir contra el iPhone y otros dispositivos de gama alta, como el Xperia Z de Sony. El órdago no llega sólo de la división tecnológica, también de la comunicativa, por el gran despliegue que ha escenificado esta madrugada.