¿Por qué seguimos usando JPEGs?

El artículo de Coding Horror demuestra que el formato JPEG (Joint Photographic Experts Group) que se originó en 1986 lleva mucho más tiempo del esperado entre nosotros. Y la razón es muy sencilla: los navegadores de Internet lo han convertido en estándar de facto, y los fabricantes y desarrolladores de hardware y software siguen apostando por un formato de compresión de imágenes que dispone de numerosas alternativas.

La más lógica es la que supone su evolución, llamada JPEG 2000, y que ofrece mucha más definición y mejor compresión en tamaños de archivo menores. Además, el tiempo de CPU requerido para descomprimir y mostrar las imágenes JPEG 2000 también es inferior, con lo que todo son beneficios.

Sin embargo, este tipo de ficheros (con extensión .jp2) – que también mejoran el tratamiento de los llamados ‘artefactos de compresión’ – no están soportados por navegadores de Internet, que siguen lidiando con el formato JPEG.

El mismo artículo cita la alternativa propuesta por Microsoft, llamada HD Photo (o Windows Media Photo), que desde finales de 2006 no requiere el pago de royalties, y al que Microsoft da soporte absoluto en Windows Vista. Muchos – si no todos – visualizadores son capaces de manejar tanto este formato como el JPEG 2000, pero sin embargo los usuarios nos empeñamos en utilizar el estándar ISO JPEG, que data de 1994.

¿Mejor lo malo conocido? µ

vINQulos
Coding Horror