Portugal utiliza la golden share para vetar la venta de Vivo

Telefónica se queda sin la parte de Vivo que pertenece a Portugal Telecom, al utilizar el gobierno portugués la golden share que posee en la operadora lusa.
La Administración portuguesa veta así la venta de la participación de la compañía lusa en la operadora brasileña, a pesar de que en la votación Telefónica consiguió un sí mayoritario.
De los accionistas presentes, el 74% dijo sí a la venta y el 26 no. Entre los opositores, algunos de los principales accionistas de la firma, como Caixa Geral.
La junta de accionistas ha llegado demasiado pronto para Telefónica: en unos pocos días, se prevé que el máximo tribunal europeo ilegalice el uso de acciones de oro por parte de los estados miembros.
Telefónica, sin voto
La ampliación de la puja de Telefónica por Vivo hacía la oferta prácticamente irresistible. La elevada participación, que llevó a la junta a los representantes del 68% del capital de la firma, también daba más cartas de juego a la española.
Aún así, el Consejo de Administración le retiró el derecho a voto a Telefónica, así como a Mediabank y a Societé Generale, lo que hizo temer por un momento que el resultado fuese negativo a los intereses de Telefónica, tras un comienzo tan prometedor.
Todo parecía decir que el resultado final iba a ser sí, a lo que el Estado parecía bastante dispuesto a transigir, según algunas declaraciones recogidas por los medios lusos. No ha sido así finalmente y, aunque Telefónica ha conseguido un sí general, no le ha servido para mucho… ya que la Administración Sócrates ha hecho uso de su acción de oro.
Y es que como señalaba en una de las televisiones portuguesas que dieron cuenta del avance de la junta un analista, tener o no tener Vivo no tiene un gran impacto en las cuentas de Telefónica; pero sí uno tremendo en las de Portugal Telecom. La presencia fuera de Portugal de la operadora lusa no es muy elevada y Vivo es la joya de su corona.
Algunos datos
Los datos de participación no son sólo algunas de las cifras mareantes de este último día de tira y afloja. La puja de Telefónica ponía el valor de Vivo en 24.000  millones de euros, tres veces más de lo que valía Vivo antes de iniciarse el proceso.
Y no sólo eso: con lo que Telefónica ha ofrecido en su última oferta por la lusa, prácticamente iguala el valor bursátil de Portugal Telecom.
Las acciones de PT se habían disparados a máximos de infarto antes de la junta de accionistas, siendo suspendidas durante la misma. ¿Qué tiene ahora que esperar la operadora?
Más información en la cobertura en tiempo real de la junta de accionistas