Ricos… ¿y raros?

¿Son los grandes genios de la industria de las nuevas tecnologías ricos y raros? Los sucesivos perfiles de los grandes de las nuevas tecnologías tienen a incidir en esas características, como si ser ‘rarito’ fuese garantía de éxito en el mundo de las nuevas tecnologías.
Uno de estos altos directivos especiales por excelencia es Steve Jobs, cuyo último perfil público y no oficial en The Times levantó una tremenda polvareda sobre si Apple habría intentado o no silenciar el artículo del diario.
Comprensible, teniendo en cuenta que incluía perlas como “si la iglesia de la Cienciología entrase en el mercado de la electrónica, sería Apple”. Jobs es, según el perfil de The Times, una persona controladora, obsesionada con el secretismo y cuyo (triste) pasado no ha impedido que él mismo lo haya repicado en su propio futuro.
Recientemente lanzado al mercado anglosajón, aunque fácilmente accesible en cualquier gran cadena de librerías en España como la Fnac, The Accidental Billionaires. Sex, money, betrayal and the founding of Facebook, de Ben Mezrich, destapa toda la verdad y, sobre todo, toda la verdad oculta sobre la creación de la red social. O eso al menos apunta  su autor.
Y aunque algunos de sus protagonistas ya han desmentido algunos de los hechos (como uno de los fundadores de Sun, que niega tener un yate en el que se sirve koala a los invitados) el texto ha ayudado a crear un perfil nuevo de Mark Zuckenberg. Solitario, obsesionado con desarrollar su producto y protector del mismo antes que fiel a sus amigos. Y además un poco paria social. Así es Zuckenberg según el perfil de Mezvich, un perfil por otra parte que le acerca muchísimo a otras mentes preclaras de Silicon Valley. 
Por su parte, Bill Gates, el fundador de Microsoft, el popular archienemigo de Jobs, tampoco se queda corto. Ha sido el hombre más rico del mundo durante muchos años. Es el más rico según la última lista Forbes de milmillonarios y el mayor filántropo del mundo, según la lista de la bondad elaborada por la prestigiosa revista. Gates vendió su primer programa informático en la adolescencia, llevándose 4.200 dólares de la época.


“No es un visionario, en groupie tecnológico con genio para los descubrimientos, para estar en el lugar adecuado en el momento oportuno”, concluye en su perfil la revista Time.
Mujeriego y vividor
Y en  medio de todos estos grandes de las nuevas tecnologías cortados del mismo patrón, una figura destaca por su enorme diferencia. Larry Ellison, el CEO y fundador de Oracle, es lo opuesto a sus colegas. Mujeriego y vividor son de las palabras con las que más habitualmente se describe a este hombre, uno de los que ha visto como su fortuna se resentía más del impacto de la crisis económica  y que tendrá que conformarse en 2010 con un sueldo de únicamente un dólar al año
Ellison está casado desde hace unos años con una escritora de novelas románticas,  uno de los episodios más curiosos de los últimos años. “Puedo confirmar que ella existe”, tenía que defender la responsable de comunicación de Oracle a los reporteros de la famosa página de cotilleos Page Six del diario The New York Post.
Los reporteros se preguntaban si en realidad la pretendida entonces prometida de Ellison, Melanie Clark, no sería un fantasma e incluso hacían cábalas con la identidad posible del autor del único libro que Clark había hasta ese momento publicado. “Ellison, de 56 años, dijo a SiliconValley.com en junio que le gusta escribir sus propias obras e historias cortas, llevando la investigación hacia la cuestión de la autoría de la única novela publicada de Craft”, apuntaban en 2001.
“No estaba segura sobre que pensar acerca de esto”, reconoce años más tarde la propia Craft. “Era divertido, pero también ligeremente perturbador”. Al menos a Craft, que sí era una persona real y no un producto de marketing para lavar la imagen de Ellison, la experiencia le sirvió de inspiración para Man Trouble, una de sus novelas, que trata sobre… un millonario que utiliza a una profesora de historia para hacerse pasar por su prometida. “A pesar de los aparentes paralelismos, y la especulación de la prensa, Man Trouble no quiere ser un roman à clef”, asegura Craft.
Roman à clef o no, lo cierto es que la extraña historia sobre la desconocida prometida del millonario es una más de las leyendas que rodean a los miembros del Olimpo de las nuevas tecnologías. ¿No se puede triunfar en este mundillo sin verse arrastrado a convertirse en el protagonista de extrañas historias?