Rusia podría estar detrás de un ciberataque al Pentágono

Los hackers se han infiltrado en un servicio de email no clasificado usado por personal de la Junta de Jefes de Estado Mayor.

El último ciberataque en Estados Unidos contra estructuras de gobierno podría ser obra de Rusia. Si hace unos meses se desvelaba que se había robado datos de más de 21 millones de usuarios de la Seguridad Social, ahora le ha tocado el turno al Pentágono de ver cómo peligra su información confidencial.

Se trata, en concreto, de los emails asociados a un servicio de correo electrónico no clasificado que se utiliza por cerca de 4.000 empleados de la Junta de Jefes de Estado Mayor, tanto militares como civiles. Según oficiales militares, citados por el digital The Washington Post sin dar nombres, las autoridades sospechan que hackers rusos podrían estar detrás de la intrusión, que supuso que de inmediato se diese de baja el sistema. Todavía no ha podido ser reactivado, aunque se espera que se pueda volver a emplear próximamente.

Las fuentes cercanas al caso apuntan a que sólo se ha visto afectado el correo, y que el daño no es excesivamente relevante, ya que los sistemas informáticos internos no se han visto afectados. La técnica empleada se conoce como spear phishing: un email de usuarios de confianza, en los que hay enlaces infectados con malware.

Aunque el ataque fue detectado el 25 de julio, no ha sido hasta hace unos días que los investigadores han relacionado a Rusia con la ofensiva electrónica. Según los oficiales, la complejidad y la avanzada naturaleza del ciberataque apuntan a que un gobierno extranjero tenía que estar detrás.

Esta nueva infiltración es similar a una ocurrida hace unos meses, en la que se consiguió acceder a sistemas no clasificados de email de la Casa Blanca y el Departamento de Estado y de la que también se sospecha que podrían haber realizado hackers al servicio del gobierno ruso.

Desde Moscú aún no ha habido comentarios.