Se avecina una descomposición de la red

A la hora de apuntar fenómenos relevantes para 2016, KEMP Technologies añade otros como el centro de datos definido por software.

El próximo año se vivirá una descomposición de la red. Al menos así lo cree KEMP Technologies, que con esta definición se refiere al salto desde lo físico al plano virtual.

“La virtualización”, comenta al respecto Eduardo García, director para la Región del Sur de Europa de KEMP Technologies, “elimina los límites de la red y sus funciones pueden desplegarse allí donde tengan más sentido. Por ejemplo, desde que las funciones de red virtualizadas pueden localizarse más cerca del usuario final, la potencia en computación puede ser distribuida en torno al extremo de la red”.

Esto, al final, “reduce la necesidad de que se tengan que enviar paquetes al centro de datos, algo crítico para una red de baja latencia”, señala García.

El directivo indica, además, que “lo que tiene sentido en el mundo físico no tiene el mismo sentido en el mundo virtual”.

“En el caso de los ADCs, podríamos colocar el firewall o los sistemas de prevención de intrusiones en el extremo, mientras que las capacidades de balanceo de carga se podrían colocar más cerca de la aplicación en el centro de datos”, explica Eduardo García. “Esto evitaría que el tráfico ‘malo’ atravesase toda la red y acabase finalmente sobrecargando el centro de datos”.

Más allá de esa descomposición, KEMP Technologies apunta a otros cuatro fenómenos a tener en cuenta a lo largo de un 2016 que está cerca de estrenarse.

Uno de ellos consiste en el empuje del centro de datos definido por software, con la ayuda de conceptos como SDN y NFV. Otro es el avance dentro de las empresas de esa red de dispositivos conectados que es el Internet de las Cosas, para temas de automatización.

KEMP Technologies también habla de DevOps y del papel de las APIs en la gestión de aplicaciones. Y no se olvida de la importancia de la seguridad, que ya no se dirigirá tanto hacia los problemas conocidos, o no únicamente, sino que debería potenciar la protección adaptativa.