Se desarrolla un protector químico que permite sumergir en agua los smartphones

Uno de los principales enemigos de los smartphones (y en general casi todos los dispositivos electrónicos) ha sido el agua. Ningún móvil ha sobrevivido a un chapuzón: no importa el precio, ni la memoria RAM, ni la potencia del procesador.

Pero esto podría cambiar. La compañía Liquipel ha desarrollado un protector químico que aísla el smartphone al cien por cien cuando éste entra en contacto con cualquier líquido. Esto es, aunque uno bucee con el smartphone a cuestas, sigue funcionando.

No es ni una funda, ni una especie de ungüento que pueda comprarse en tiendas físicas ni virtuales. Aquellos que quieran proteger su móvil deberán enviarlo a la compañía (en California), donde será tratado por 60 euros (depende de los gastos de envío).

vINQulos

Liquipel