Los que cambiarán de forma más radical serán los MacBooks de 13 pulgadas, que entre otras cosas modificarán su carcasa de plástico para sustituirla por materiales más ecológicos como aluminio y acero inoxidable, algo que afirman fuentes cercanas a la empresa.
Los MacBook Pro también tomarán prestados ciertos elementos de diseño de los iMacs que se presentaron en agosto de 2007 y que también tienen ese acabado en aluminio, lo que unificará la gama y hará que esa promesa de Jobs de convertir a Apple en una empresa ‘más verde’ puede llegar a buen fin.
Otro cambio importante sucederá en su interior, donde se espera que lleguen los nuevos procesadores móviles de Intel con sus Montevina, pertenecientes a la familia Centrino 2, y que entre otras cosas harán uso de una nueva placa madre con el denominado ‘Socket B’. Esos Penryn para portátiles tienen un FSB a 1066 MHz y van de los 2,26 a los 2,8 GHz.
vINQulos