Tecnología en las empresas ¿necesidad u obligación?

La renovación tecnológica al interior de las empresas españolas más que una necesidad es una obligación. La realidad actual del mercado señala que si nuestras empresas quieren mantener un nivel competitivo frente a nuestros socios europeos, tienen que incluir en su planificación iniciativas de modernización de sus sistemas y herramientas de trabajo.
Esta situación se hace patente en un mercado cada vez más global en donde las exigencias, la competencia y los retos son cada vez mayores. Las compañías deben responder por medio de la tecnología al paradigma de la empresa ágil del siglo XXI.
En España, en donde el 96% del tejido productivo está constituido por las PYMES, esta modernización ha tardado más de lo habitual. Sin embargo, y con el paso del tiempo, los empresarios españoles se han concienciado de la necesidad de encaminar sus negocios hacia la modernización tecnológica.
A día de hoy, podemos decir que el 90% de estas empresas, ya cuenta con alguna tecnología informática (ordenador, telefonía móvil, comercio on-line, tecnologías de la información entre otras), dato muy significativo pero que sólo evidencia la necesidad y la obligación de ir un paso más allá en términos de implementación tecnológica en las empresas.
La posibilidad de tener una visión en tiempo real de las oportunidades y amenazas del negocio, posibilita al empresario adoptar medidas específicas que ayuden a mantenerse en lo más alto del mercado. Esta visibilidad se adquiere por medio de las llamadas tecnologías de la información.


Según datos de ONTSI (Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información) más de la quinta parte de las empresas españolas con más de 10 trabajadores cuentan con herramientas CRM. Con respecto a sistemas ERP, estos son utilizados por el 12,5 por ciento del total de empresas españolas, y su uso se incrementa todavía más entre medianas (hasta 249 empleados) y grandes organizaciones (más de 250 trabajadores).
Esta necesidad e intención de modernizar sus empresas, hace que sea necesario que tanto entidades privadas como públicas, pongan en marcha iniciativas que potencien la implementación de este tipo de tecnologías en el tejido empresarial español.
En la actualidad y más aún en tiempos de crisis como el que vivimos, es muy importante que desde todos los sectores seamos concientes de la importancia que tiene el poder acceder a herramientas que impulsen las empresas de nuestro país y además, busquemos formas de facilitar y apoyar iniciativas que busquen este cometido.
Sólo de esta forma conseguiremos mantener la competitividad necesaria para seguir escalando posiciones en el mercado global. La informatización de la industria española y el apoyo a que se dé esta condición, es una obligación, si en realidad queremos que nuestro país logre mantenerse dentro del grupo de economías sólidas a nivel mundial.