Tendencias 2010: Virtualización en servidores

La recesión económica ha favorecido notablemente la introducción de la virtualización en el lado del servidor, algo que durante este año se verá potenciado gracias a un mercado más maduro y al apoyo de gran parte de la Industria.

Gartner ha pronosticado que las cargas de trabajo ejecutándose en máquinas virtuales crecerán significativamente durante 2010. Aunque también hay analistas que no lo tienen demasiado claro, lo cierto es que la eficiencia en el centro de datos es el objetivo primario de las empresas, una característica que precisamente la virtualización bien implementada permite conseguir.

En octubre de 2009, tan sólo el 16% de las actuales cargas de trabajo en TI se ejecutaban en máquinas virtuales. Sin embargo, esta cifra crecerá hasta el 50% a finales de 2012 según Gartner, en especial en las pequeñas y medianas empresas.

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A nivel de innovación y desarrollo, durante 2009 han existido grandes noticias al respecto, no sólo en el segmento del software, sino también en el de hardware, a través de nuevas instrucciones a nivel de procesador que AMD e Intel han implementado en sus últimos micros para servidores.

En el apartado del software, compañías como VMware o Microsoft han potenciado su presencia en este sector, pero otros desarrolladores, especialmente los que evolucionan soluciones basadas en código abierto como Citrix o Sun, también han hecho lo propio con sus productos.

El resultado para este año será un mercado mucho más maduro donde se aprovecha de forma creciente la potencia de las nuevas arquitecturas multinúcleo. Hasta hace poco, los servidores que contaban con varios núcleos y procesadores no conseguían el máximo rendimiento porque, simplemente, no había software que fuera capaz de hacerlo.

Y si la virtualización brilla con luz propia es precisamente debido a este detalle. Intel y AMD están en continuo desarrollo de sus Nehalem e Istanbul, respectivamente. Procesadores que prometen, además de potencia, una gran eficiencia energética.

Las empresas que se den cuenta de ello –y tengan el potencial económico- actualizarán paulatinamente sus líneas de servidores para sacar el máximo partido de sus infraestructuras (virtualizadas o no) y mantener controlado el gasto de su factura eléctrica.