Verdades y mentiras sobre el iPad Mini

Apple ha convocado un evento el próximo martes día 23 para, salvo sorpresa mayor, presentar la rumoreada versión en miniatura de su famosa tableta. ¿Qué podemos esperar de este nuevo iPad?

Fiel a sus costumbres, Apple ni confirma ni desmiente. Pero ya ha enseñado la patita en forma de invitación a los medios. Este martes día 23 de octubre y salvo sorpresa de última hora, la firma de la manzana mordida mostrará a los medios congregados en el Yerbabuena Center, y por extensión a millones de fanboys en todo el mundo, su última creación: el iPad Nano, iPad Air o, según se ha resuelto por bautizo popular, el iPad Mini. Lo cierto es que, se llame como se llame, en Cupertino tienen “algo más que enseñar”, “algo pequeño”.

Y los analistas ya han comenzado a trazar cábalas. Hasta el momento se asegura que Apple ha encargado la friolera de 10 millones de unidades de iPad Mini en su pedido inicial, lo que significa el doble de dispositivos de los comercializados por Amazon el año pasado tras presentar su Kindle Fire original. La comparación es necesaria ya que la tableta del gigante de Seattle es uno de los principales rivales a batir por Apple en esta nueva aventura. Por primera vez en mucho tiempo, la compañía californiana no se posicionará como esa fábrica de ideas disruptivas a las que nos tiene acostumbrados, sino que pasará por el aro abierto por otros antes que ella. Más allá del Kindle Fire tendrá enfrente al Nexus 7 que surgió de la colaboración entre Asus y Google, una rumoreada segunda tableta de la firma de la G valorada en tan sólo 99 dólares o incluso la Iconia A110 que Acer anunciaba ayer mismo.

Pero también tendrá que plantear una estrategia lo suficientemente inteligente como para no canibalizar las propias ventas de sus hermanos mayores, los anteriores iPads. De hecho, ya hay quien aventura que la versión en miniatura arrastrará hacia su terreno el 20% de las ventas regulares conseguidas por las otras tabletas de Apple. Esto quiere decir que, por cada 5 millones de iPads Mini colocados, la compañía de la manzana podría perder un millón en generaciones previas. Lo que no implica que los beneficios vayan a ser menores, ni mucho menos.

Así las cosas, ¿cómo será físicamente este dispositivo? De acuerdo con las imágenes filtradas se parecerá mucho más a un iPod Touch grande, o incluso al iPhone, que a un iPad como los actuales previo paso por la “secadora”. Se habla de delicados biseles en los bordes y de una delgadez extrema, ambas características que facilitarían su transporte y sujeción con una sola mano desde la parte trasera. Ahí mismo se radicaría su micrófono. Otros detalles se refieren a botones de volumen independientes en vez de una única pieza, evolución desde LTE a Wi-Fi para ahorrar en costes, conector Lightning y cámara frontal pensada para realizar video-llamadas. Y, sobre todo, una pantalla LG de 7,85 pulgadas más amplia que la de sus rivales, con ratio 4:3.

No habrá uno, sino hasta 16 modelos diferentes, dependiendo de su color (blanco o negro), su capacidad de almacenamiento (8 GB, 16 GB, 32 GB, 64 GB) y sus opciones de conexión (inalámbrica vs 3G). Esto estira la horquilla de precios desde los 249 euros del iPad Mini de 8 GB y Wi-Fi hasta los 649 euros de la hipotética tableta más cara, la que combina 64 GB de memoria y conectividad 3G. Aunque algunas fuentes de la industria, basándose en ciertas hojas de producto que circulan por Internet, cuentan hasta 24 versiones de iPad Mini listas para su puesta de largo.

Lo que no tendrá ninguna de ellas es una resolución tan elevada como la que lucen otros dispositivos de la marca, y es que  la lógica indica que la empresa de la manzanita prescindirá de la tecnología Retina Display presente en iPhone 4, 4S y 5, en el MacBook Pro y por supuesto en el último iPad. Y todavía es incierto si optará por incluir una segunda cámara, si se decantará por el chip A5X o por el reciente A6 y si Steve Jobs habría dado el visto bueno a un producto de este calibre.

¿Nuevo MacBook Pro?

Por si contradecir los deseos de Jobs no fuese suficiente, los chicos de Cupertino estarían pensando en sazonar el lanzamiento de esta miniatura con la actualización de otros dispositivos ya presentes en su cartera de hardware. Junto al iPad Mini se espera que lleguen dos ordenadores portátiles MacBook Pro de 13,1 pulgadas con pantalla Retina. La diferencia entre uno y otro radicaría en su procesador y en el tipo de configuración para almacenamiento de información. Para comprobar tal extremo todavía hay que esperar unos días. Todas estas novedades deberían llegar al mercado el 2 de noviembre, si los mentideros no se equivocan. La experiencia de momento avala su teoría: Apple nunca se hace de rogar a la hora de poner sus productos en circulación tras un evento de presentación y suele jugar con una media de 10 días de margen. Lo veremos.