Las vicisitudes de Dick Costolo al frente de Twitter y su definitivo adiós

La presión inversora sobre un cambio en la dirección que permita relanzar la red de microblogging ha acabado con la hoja de ruta de Costolo.

Desde que Twitter presentó su Oferta Pública Inicial (OPI) todas las miradas han estado puestas en la gestión de su CEO, Dick Costolo, para satisfacer las necesidades de rentabilidad de los accionistas, pero el balance no ha sido positivo.

A pesar de que Costolo consiguió enderezar la compañía desde un inicio caótico hasta su salida a Bolsa, los resultados de la red social, con un ralentizado aumento del número de usuarios y la difícil conquista de los anunciantes, no han convencido a los inversores.

Tras la pérdida de la confianza de los acreedores y bajo la presión de un cambio de rumbo en la plataforma, Dick Costolo abandonará su cargo el próximo 1 de julio siendo sustituido por otro de los cofundadores de la red social, Jack Dorsey, como CEO interino hasta que la compañía encuentre un nuevo líder.

En el último año, Costolo ha tenido que hacer frente a graves crisis, como el derrumbe de las acciones de la empresa hasta un mínimo histórico; el abandono de gran parte del equipo directivo que directamente le reportaba; y la venta masiva de acciones en manos de los empleados al vencer la cláusula que lo impedía tras la OPI.

Todos estos han sido síntomas de que ni la propia plantilla creía firmemente en el proyecto de encontrar una fórmula para monetizarse, a pesar de que el CEO ha defendido a capa y espada la hoja de ruta con esfuerzos dirigidos en varias direcciones.

Entre ellas, Twitter ha apostado por su rediseño, las aplicaciones, la conquista de los usuarios en Asia (concretamente en China) y el marketing para atraer más usuarios a su sitio con el objetivo de disparar el potencial publicitario.

Pero Wall Street se ha sentido decepcionado y ha pedido la renovación de la junta directiva para alcanzar sus expectativas. ¿Qué fichas moverá ahora Twitter?