“Nuestro plan de disponibilidad para XP no ha cambiado. Estamos convencidos de que esta es la mejor forma de actuar según el feedback que hemos recibido de nuestros clientes y partners”, afirmaba una representante de Microsoft que explicaba que a pesar de los comentarios en los que Ballmer apuntaba a una posible prórroga en la desaparición de XP, esta no se produciría.
Eso sí, esta representante señaló que efectivamente Microsoft escucha atentamente a sus clientes y habrá casos excepcionales en los que las políticas respecto a Windows XP variarán ligeramente. Algunas empresas que compran licencias por volumen de Vista Ultimate o Vista Business pueden pedirles a los proveedores que realicen el “downgrade” a Windows XP, y además está esa exención para ordenadores ultraligeros de bajo coste y otros MIDs que seguirán pudiendo integrar Windows XP.
Sin embargo, para el resto del mundo, la fecha de la muerte anunciada de XP seguirá imperturbable.
vINQulos